De la pobreza cero y la inflación de un dígito, a tres años de mandato, la prioridad del Gobierno es no volver a caer en una crisis cambiaria. El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, explicó que la principal búsqueda del oficialismo es evitar que la economía se desangre. Cambio de expectativas, giro discursivo y relanzamiento de cara al 2019.

Según explicó el funcionario en diálogo con radio Mitre, el Gobierno debió aplicar un torniquete monetario para evitar que la economía caiga en picada. En tanto, remarcó que la situación economía del presente es "muy compleja” y que las medidas impuestas por el banco central -la alta tasa de interés, sobre todo- no pueden mantenerse por mucho tiempo.

De cara al 2019, el Gobierno debe dinamizar la economía si pretende llegar con algo de aire a los comicios. Mientras que el oficialismo y el FMI sostienen que el rebote empieza en enero, las consultoras privadas afirman que recién en segundo semestre cambiarían los números, lo que complica las proyecciones oficiales sobre la reelección de Mauricio Macri.

Respecto de la crisis cambiaria, Frigerio resaltó que "fue un golpe tremendo para la Argentina" y señaló que "costó recuperarse" de eso: "La economía venía creciendo hasta marzo o abril, de hecho el primer trimestre de este año ha sido uno de los mejores pero en abril ocurrió algo que fue la reversión de todos los mercados y eso nos afectó mucho más a nosotros".

"Se devaluó nuestra moneda, tuvimos que modificar nuestra política económica, tener una política monetaria más severa y una fiscal más estricta. Tuvimos que aplicar un torniquete para que la economía no se desangre", precisó.

"Creo que esta situación no puede permanecer en el tiempo mucho más, tenemos que ir aflojando el torniquete pero siempre sabiendo que hay que priorizar la vida del cuerpo, que en el camino no se nos queden todas las Pymes. Hoy la prioridad es no volver a caer en una crisis cambiaria", concluyó.