La moda en Game of Thrones, un elemento vital en el arco narrativo de los personajes
La consultora Workforce Incorporated registró que casi 11 millones de estadounidenses faltaron a su trabajo el lunes siguiente a la emisión del último capítulo de Game of Thrones, un episodio que alcanzó los 19 millones de espectadores y logró el récord de audiencia para HBO. Con estas estadísticas superó a Los Sopranos, que en 2002 había alcanzado a 13 millones de espectadores durante el estreno de su cuarta temporada.
Lo cierto es que, sumado a batallas memorables, conflictos políticos, desencuentros amorosos y tensiones familiares, Game of Thrones nos ofrece nuevas lecturas a partir del significado de la moda en la construcción de cada personaje, representando la evolución psicológica y el recorrido particular en la construcción de poder.
La encargada del vestuario es la ganadora del Emmy, Michele Clapton, quien también trabajó en The Crown y The Devil's Whore junto a un equipo conformado por 80 personas. Acaba de lanzar “Insight Editions, Game of Thrones: The Costumes”, un libro que recopila lo mejor de la moda de la serie y relata el proceso de toma de decisiones para que la ropa acompañara de manera natural la evolución de los personajes.
En una entrevista con Vanity Fair, Clapton confesó que el recorrido que más disfrutó desarrollar fue el de Sansa, pero también que le resultó divertido vestir a los personaje de clima cálido de Essos para el frío del norte en la última temporada.
"Decidí que Dany proporcionaría pantalones acolchados a sus tropas inmaculadas para mantener su silueta y uniformidad. También tomé referencias de las tribus de las colinas que había creado en una temporada anterior, y les hice tejer pieles de conejo y cualquier otra cosa que pudieran encontrar para crear protección. Tenían que parecer salvajes y locos a los ojos de los norteños", explicó.
Game of Thrones nos ofrece nuevas lecturas a partir del significado de la moda en la construcción de cada personaje
Sansa Stark fue uno de los personajes que más reflejó su desarrollo personal a través de la ropa. En los primeros episodios, cuando era apenas una niña al cuidado de sus padres, usaba vestidos de princesa en colores claros. Cuando se mudó a Desembarco del Rey para casarse con Joffrey, adoptó elementos de estilo de Cersei como las mangas largas y los peinados elaborados.
La falta de voz propia era parte de su historia, pero después de sobreponerse al secuestro de los Lannister, a Ramsey y a Meñique, Sansa se transforma y toma decisiones, también en la moda, alcanzando un estilo identificable y dark en la última temporada, compuesto por abrigos negros, collares heavy metal y vestidos con hombreras pronunciadas.
Daenerys Targaryen, por su parte, comenzó vistiendo taparrabos salvajes y visos pastel, similares a los que usaban las trabajadoras sexuales y las criadas, hasta alcanzar los abrigos negros con la textura de la piel de los dragones o los de piel blanca como la nieve.
Respecto de los peinados de la serie, Daenerys comenzó usando trenzas sencillas hasta evolucionar en el uso de peinados muy elaborados. Cada trenza simboliza las victorias que ha obtenido a través de toda su historia, una costumbre que aprendió de los Dothraki en la primera temporada. En su tradición, los guerreros pueden trenzar su cabello sólo si han tenido éxito militar. Si pierden una batalla, deben cortarla y empezar de nuevo.
En los primeros episodios de la serie, a Cersei Lannister se le vio con peinados complejos, clásico de las mujeres del sur de Westeros y distintivos de las mujeres de clase alta. A la manera de Sansón, en la quinta temporada le cortan el pelo tras la muerte de su padre dando inicio a la pérdida incesante del poder acumulado.
Su ropa también evoluciona: de los vestidos vaporosos en rosa y coral, con pájaros bordados, a los trajes de cuero perforado parecidos a los usaba su padre, y el negro como bandera: no refleja solo el luto por la muerte de sus hijos sino su muerte interior.
Sansa también comenzó su participación en la serie luciendo peinados elaborados y representativos de la clase alta, pero luego se fue inspirando en las personas que fueron ejerciendo cierta influencia en su evolución. No es casual que haya comenzado a lucir un peinado parecido al de Margaery Tyrell.
Por su parte, la ausencia de peinado en personajes como Brienne de Tarth o Arya Stark en las últimas temporadas también significa algo: su no participación en el mercado del matrimonio y el amor.
La industria de la moda no tardó en subirse a la ola de los fanáticos: Urban Decay lanzó una línea de maquillaje inspirada en los personajes femeninos y Adidas lanzó una campaña compuesta por seis modelos de zapatillas de edición limitada creados a partir de personajes destacados: Guardias de la Noche, Daenerys, Caminante Blanco, Casa Stark, Casa Targaryen y Casa Lannister. Se ofrecen en diferentes colores que representan a cada familia, como blanco con vivos plateados, gris con tonos negros, rojo con negro y dorado, negro con blanco, negro con rojo y blanco con vivos azules.
También hubo colecciones inspiradas en la serie como la de Dolce&Gabbana 2019, que ofreció los tejidos metálicos y las armaduras características de Jamie Lannister; Ann Demeulemeester, quien ha retomando las pieles y los tejidos pesados de Jon Snow; y la última colección invernal de Gucci, que mostró los chalecos, los accesorios de metal y el gris plomo de la indumentaria de Tyrion Lannister.
La ropa nos dice mucho sobre los demás y Game of Thrones llevó esto a su punto de ruptura. Cada nuevo vestido, cada nueva armadura, cada nuevo color introducido en la pantalla, nos ha contado un secreto sobre los personajes y sobre sus planes. Si prestamos atención, podemos entender su camino a través del lenguaje de la moda.