"Nos defendemos porque no me quiero comer 11 de nuevo". Así de crudas fueron las palabras del cuerpo técnico de la Selección Argentina de fútbol femenino para sus jugadoras en los partidos del Mundial de Francia, según reveló esta tarde su capitana, Estefanía Banini, quien junto a otras referentes como Lorena Benítez, Ruth Bravo y Belén Potassa quedaron marginadas del plantel que competirá en los Juegos Panamericanos de Lima.

Luego de la histórica participación del conjunto albiceleste en el Mundial, donde por primera vez en todas sus presentaciones marcó goles -fueron tres, en el empate ante Escocia- y sumó puntos -dos, al también igualar con Japón-, el entrenador Carlos Borrello había sorprendido la semana pasada al excluir de la nómina preliminar a cinco de las futbolistas que hace tres semanas estuvieron cerca de clasificarse a los Octavos de Final. 

Esta tarde, al oficializar a las 18 jugadoras que buscarán clasificar al país a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, se confirmaron las ausencias de otras dos jugadoras clave en el equipo: las delanteras Florencia Bonsegundo y Soledad Jaimes.

"El cuerpo técnico decidió dejarme afuera. Ellos, que por tener diferencias han decidido ponerle punto final a mi sueño de defender la camiseta más linda. El motivo de esto es muy simple. Pensamos que ellos no están a la altura de lo que pretendemos", disparó, sin miramientos.

La carta fue replicada por Bravo y Potassa. Bonsegundo, en cambio, afirmó que decidió hacerse un lado por solidaridad con sus compañeras. "Yo decido bajarme de la lista por no compartir decisiones de ese cuerpo técnico", anunció.