Dos sobornos y un patrimonio en la mira: Thomas, el último detenido en los cuadernos

Era el único prófugo de la investigación que destaparon los cuadernos del ex chofer Oscar Centeno, con empresarios y exfuncionarios procesados y en prisión. El paradero de Oscar Thomas fue todo este tiempo un misterio, aunque se presumía que se encontraba fuera del país. El exdirector ejecutivo de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY, quien finalmente hoy fue arrestado en la causa de las coimas, enfrenta una situación compleja y es uno de los más acorralados por el juez Claudio Bonadio.

Su nombre aparece varias veces entre los ocho cuadernos de Oscar Centeno. Al igual que lo que sucedió con Rudy Ulloa, el ex chofer de Néstor Kirchner que se convirtió en un importante empresario de medios en el sur del país, la curva patrimonial de Thomas también se disparó durante los tres mandatos del matrimonio Kirchner.

Dos sobornos y un patrimonio en la mira: Thomas, el último detenido en los cuadernos

En el mismo sentido, sus aportes "a la Corona” en concepto de sobornos asciende a casi dos millones de dólares. Las hojas de los cuadernos Gloria de Centeno lo salpican en todos los sentidos y, aunque permanecía en un país árabe que su entorno no quiso revelar, la alerta roja de Interpol que Bonadio exigió en su contra lo obligó a repensar la estrategia.

Al respecto, su abogado fue claro. "No se va a entregar ni soñando”, avisó. "Lejos de estar prófugo, todo lo contrario, mi cliente quiere participar del debate, pero quiere estar libre, algo que se garantiza en la Constitución a todos los ciudadanos", señaló. El abogado reiteró que su cliente no se va a presentar ante la Justicia y aseguró que si el juez Bonadio no le concede el beneficio, "recurriremos a la Cámara, sino a Casación o hasta la Corte Suprema". Ni un día preso. Esos son los términos que Thomas en los que estaba dispuesto a entregarse, aunque deberá ir a prisión hasta que la Cámara Federal resuleva su futuro.

"No se va a entregar ni soñando”, dijo el abogado de Thomas

Según la investigación de La Nación, Thomas aportó en 2009 unos us$1,1 millones en sobornos. De los cuadernos de Centeno se desprenden otros aportes: por ejemplo, en 2013, el entonces chofer de Baratta apuntó:  "Mientras viajábamos (Roberto Baratta) lo llamó al jefe (Julio De Vido) y le dijo que entre Yacyretá y Transporte habían 'aportado para la Corona' U$S 657.000".

El exfuncionario tiene otras acusaciones en su contra. Una de ellas por un supuesto enriquecimiento ilícito que se originó a raíz de la construcción de una mansión a la vera del río Paraná que el exdirector de EBY nunca pudo justificar con sus ingresos, ya que se trata de una propiedad de 2400 metros cuadrados y una playa privada de 100 metros. En su última declaración jurada, Thomas informó un patrimonio de 20 millones entre los que incluyó cuatro casas, siete departamentos y nueve terrenos en Candelaria.