Finalmente, el camino se encuentra allanado para que el Máximo Tribunal discuta mañana el per saltum presentado por Bruglia y Bertuzzi contra su desplazamiento resuelto por el Senado.

La Cámara Contencioso Administrativo Federal, integrada sólo por Guillermo Treacy y Jorge Alemany, no alcanzó un acuerdo sobre los traslados y deberá convocar a un tercer magistrado para desempatar la cuestión, lo que por los plazos planteados deja vía libre a la Corte para discutir el per saltum.

Quien sí se pronunció fue el fiscal general de la Cámara, Rodrigo Cuesta, que dictaminó en contra del pedido de amparo de los jueces Bruglia y Bertuzzi.

De escraches y repudios

El clima general de conflicto en que los jueces tratarán el tema, sin embargo, escaló en las últimas 72 horas. Luego del mensaje de Alberto Fernández el viernes al presidente de la Corte Suprema, el sábado tuvo lugar una manifestación en Rafaela en la puerta del domicilio del extitular del Tribunal, Ricardo Lorenzetti.

La presión de los manifestantes sobre el magistrado a pocos días de discutir el tema despertó rápidamente el repudio de la mayoría del arco político. Desde el primer mandatario hasta el expresidente Mauricio Macri se pronunciaron en rechazo a ese tipo de acciones.

Sólo Elisa Carrió mantuvo silencio y ¿habló? con un video en redes sociales  convocando a la "defensa de la República". Sí se refirió al tema el diputado que responde a Lilita, Juan Manuel López, que se desmarcó del resto del arco político al minimizar el asunto y sugerirle a Lorenzetti que "pare la mano". Es sabida la animosidad de la líder de la Coalición Civíca con el rafaelino.

Por otro lado, a pesar del repudio "antigrieta", el tema no tardó en caer nuevamente en un tironeo entre oficialismo y oposición. Desde el gobierno nacional apuntaron contra Juntos por el Cambio por alentar las manifestaciones-como la ocurrida la semana pasada frente a Tribunales- y colaborar en la instalación de un clima político de polarización.

En este contexto la Corte deberá discutir, primero, si hace lugar o no al reclamo de Bruglia y Bertuzzi de poder saltearse una instancia judicial por la urgencia del tema y, segundo, pronunciarse sobre la cuestión de fondo. Alrededor de estas dos cuestiones rondan las especulaciones ya que, como es sabido, con la ausencia de mayorías que hoy existe en el Tribunal, los supremos podrían habilitar la discusión pero luego demorar su definición.

La máxima instancia del Poder Judicial también acumula otras causas importantes para el gobierno como el reclamo por el traspaso de un punto de coparticipación de CABA a Provincia y la modificación en el cálculo de los haberes jubilatorios.

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La mayoría que se forme y la definición que se tome en este asunto podría ser un indicador de cuál será la relación entre la Corte y el gobierno durante el mandato de Alberto Fernández. No obstante, hay quienes estiman que se impondría una salida salomónica.