Los festejos de Año Nuevo llevaron al Gobierno porteño a intensificar los controles de alcoholemia en este primer miércoles del 2025. En el marco del operativo integral de prevención y seguridad, se pusieron en marcha puntos de chequeo rotativos en las 15 comunas de la Ciudad de Buenos Aires. Según las primeras cifras de la mañana, de las 5.788 pruebas realizadas sólo 32 fueron positivas. 

Los números provisorios de conductores que bebieron fueron inferiores a las 61 personas que presentaron alcohol en sangre en Navidad. Durante ese festejo, se retuvieron 64 licencias de conducir en el ámbito de la Ciudad tras llevar a cabo entre la noche del 24 de diciembre y la madrugada del 25 más de 6.000 testeos.

En el 2024, las autoridades desarrollaron más de 360.000 revisiones en dicho territorio. El índice de positividad en la última festividad del año que se fue quedó en un 0,99%.

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El operativo del Año Nuevo 2025 incluye a personal del Servicio de Atención Médica de Emergencia (SAME), que reforzó su dotación en la Central Operativa 107 y del servicio de Telemedicina, además de la línea de Emergencias 911, y la de Defensa Civil y el 103. Por otra parte, se incrementó la presencia de efectivos del Sistema Integral de Seguridad, en 25 parques y plazas porteñas con el objetivo de prevenir delitos y contravenciones.

En lo que respecta a los límites de consumo de alcohol para quienes van al volante, en la Ciudad se mantienen en hasta 0,5 gramos por litro de sangre para los que manejan vehículos particulares, 0,2 gramos por litro para motociclistas y 0 (cero) para principiantes y conductores profesionales. 

Las sanciones para todos los que dan valores por encima de lo permitido incluyen inhabilitación por un mínimo de dos meses, retención de la licencia y, dependiendo del dosaje encontrado, una serie de multas. 

Entre 0,5 y 1 gramo la pena es de $94.530 a $630.200. Hay que pagar también el acarreo del coche. En tanto, de 1 gramo de alcohol en sangre en adelante, el desembolso por la penalización va de $189.060 a $1.260.400 (o uno a diez días de arresto). La imposibilidad de contar con la licencia aumenta a entre cuatro meses y dos años. 

En todos los casos, cuando se trata de la primera contravención, los plazos de inhabilitación pueden reducirse a la mitad si se aprueba el curso de seguridad vial.