Golpea Casanello en la ruta del dinero K: van Báez y otros 20 acusados a juicio oral pero salva a Cristina
La titular de la Oficina Anticorrupción expresó su disconformidad ante la decisión del juez de dejar afuera a la ex presidenta. En la causa se investiga el lavado de dinero de más de tres mil millones de pesos ligados a la obra pública.
El juez federal Sebastián Casanello elevó el expediente de la causa conocida por "la ruta del dinero K" que tiene como principal acusado al empresario amigo del kirchnerismo Lázaro Báez. Asimismo, a pesar del pedido de la fiscalía, la elevación no actúa sobre la ex presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner.
La causa de "la ruta del dinero K" investiga el lavado de dinero de más de tres mil millones de pesos, asociados a la investigación que lleva a cabo el juez Julián Ercolini en el marco del fraude y la corrupción en la obra pública. La ex presidenta aún no fue citada por este expediente. Sin embargo, el juez sí pidió su investigación.
En la última semana, el empresario Lázaro Báez -profundamente ligado al kirchnerismo, ya que fue el principal contratista en los doce años de gobierno- manifestó que él sólo tenía una relación de amistad con el expresidente Néstor Kirchner, pero no sucedía lo mismo con Cristina. Asimismo, Báez remarcó que su amistad con quien fue presidente entre 2003 y 2007 le permitió conseguir trabajo pero que él no cometió delito alguno en su condición de empresario.
La resolución de Casanello no fue bien vista por los funcionarios del oficialismo. La titular de la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso, expresó su disconformidad con el juez por no haber incluido a Cristina en la elevación a través de redes sociales. "Otra negativa de Casanello. Oficina Anticorrupción presentó queja ante la Cámara Federal para que se cite a declaración indagatoria a Cristina Kirchner", sostuvo Alonso.
Junto con Lázaro Báez, irán a juicio otros 24 procesados en el marco de la causa. Entre ellos se destacan los cuatro hijos del empresario, su abogado Jorge Chueco, su contador Daniel Pérez Gadín, el arrepentido Leonardo Fariña y Federico Elaskar, ambos testaferros de Báez.