Díaz-Canel, el hombre elegido para la era posCastro en Cuba
El vicepresidente fue el encargado de ocupar el sillón presidencial que quedó vacante.
Tal como anticipó elCanciller en los últimos días, Miguel Díaz-Canel se conviertió finalmente en el sucesor de Raúl Castro y en el primer presidente en no portar el apellido Castro desde 1959.
El funcionario de 57 años, que nació luego de la Revolución y se crió en plena guerra fría durante la era dorada de Fidel Castro, realizó su carrera política despacio y sin saltear etapas.
Hace 10 años, era el político rockstar que con su pelo largo paseaba en bicicleta saludando a los vecinos. Con un estilo personal y directo, dirigió su provincia de origen antes de ser ascendido y trasladarse a La Habana.
"Constante y en calma", así describen los medios cubanos al enigmático personaje que perdió su apodo de estrella de rock. Serio, de pocas palabras, de perfil bajo y con escasa visibilidad pública, muchos cubanos apenas lo conocen.
Se lo reconoció mundialmente gracias a los viajes diplomáticos. Es el encargado de representar a Cuba desde 2013. Se lo vio muy amigable con Kim Jong Un durante una visita a Corea del Norte y posó junto a Evo Morales durante un viaje a Bolivia para homenajear los últimos días del "Che" Guevara.
Díaz-Canel acostumbra a acudir a sus reuniones con una tablet y se muestra en público con su familia, algo inusual entre la vieja dirigencia cubana, reacia a las nuevas tecnologías y a la exposición pública de su vida privada.
El flamanete presidente deberá enfrentarse a una economía estancada, una infraestructura en decadencia, la hostilidad de Estados Unidos que no levantó el embargo, ni las sanciones contra la isla y las críticas a un modelo de control estatal con salarios bajos en el marco de un congelamiento de la iniciativa privada.