Despidos, renuncias y un mail: escándalo en el INCAA por $6 millones en artículos de librería
A poco más de una semana del discurso de Mauricio Macri que anunciaba una "aceleración" en el ajuste para reducir el déficit fiscal, el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) se ve sumergido en un escándalo por corrupción y malversación de $6 millones y medio destinados a "gastos de imprenta".
Todo se originó por un mail anónimo que involucraba a seis empleados, informaba el monto exacto de dinero malversado y adjuntaba facturas y comprobantes de las sucias maniobras. El correo señalaba que en tan solo cuatro meses (enero a abril de 2018) la Gerencia de Asutons Internacionales gastó $6.487.600 en simples artículos de librería, como remeras, lapiceras, cuadernos, pendrives y folletos.
El mensaje, que fue enviado desde una cuenta anónima (incaacorrupto@gmx.es) el 11 de mayo, fue destinado a las máximas autoridades del organismo; al ministro de Cultura de la Nación, Pablo Avelluto; a su par porteño, Enrique Avogadro, a la oficina Anticorrupción y; a distintos periodistas "oficialistas" y "opositores".
Tras conocerse el escándalo y según consignó Infobae, el director del INCAA, Ralph Haiek, abrió sumarios internos, le reclamó la renuncia al gerente de Asuntos Internacionales, Bernardo Bergeret Balverde; suspendió al responsable de compras de la misma área, Alejandro Righini; se desplazó hacia otro sector a Pablo Maggioni, quien estaba a cargo de Righini y; se rescindió el contrato de la asesora de compras del organismo, la abogada Sandra Menichelli. A su vez, el gerente Administrativo, Nicolás Yocca, presentó su renuncia.
Según se sospecha por la cantidad de pruebas brindadas y el detalle de la planificación y conocimiento, se estima que el denunciante anónimo del escándalo sería algún empleado del organismo con acceso a facturas y comprobantes.