Colectivos: se trabaron las negociaciones de las empresas con el Gobierno y la UTA podría convocar a un paro
Se tensó más el debate entre las compañías que operan las líneas de transporte en el Área Metropolitana de Buenos Aires y el sindicato, que reclama el pago del aumento salarial preacordado. Este miércoles continúa la discusión.
La Unión Tranviarios Automotor (UTA) podría convocar a un paro de colectivos a partir del jueves en el Área Metropolitana de Buenos Aires, luego de un nuevo fracaso en las negociaciones entre el Gobierno y las cámaras de transporte en el marco del conflicto salarial con los choferes. Este miércoles habrá un nuevo intento por llegar a un acuerdo entre las partes, después de que desde el Ejecutivo manifestaran que no tienen autoridad en el debate paritario.
Con respecto a los trabajadores, reclaman que al básico de marzo se le incorpore una suma no remunerativa de $250.000 pactada previamente, que llevaría el sueldo inicial de los $737.000 pactado en febrero a $987.000.
Luego de una audiencia en la Secretaría de Transporte, Luciano Fusaro, vicepresidente de la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor, admitió la dificultad de la situación y la necesidad de paciencia por parte de todos.
"En el corto plazo tenemos que construir una propuesta para discutir con el gremio pero priorizando la paz social. Vamos a hacer el mayor esfuerzo dados los elementos que tenemos. Es necesario un aumento de tarifas, hay que evaluar cómo y cuánto. Un boleto sin subsidio es de 1.200 pesos. De ahí a lo que se paga ahora hay distintos niveles de subsidio. Nosotros fijamos nuestra postura pero es el Estado el que decide porque es un servicio regulado", aseguró.
A lo largo de la reunión, las cámaras de transporte automotor presentaron sus necesidades y demandas, mientras que el titular de la cartera de Transporte, Franco Mogetta, solicitó comprensión a los empresarios ante la situación del país y los instó a resolver el conflicto con UTA para garantizar el servicio a los ciudadanos en condiciones normales, durante las próximas jornadas.
En tanto, la Secretaría de Transporte sostiene que no tiene autoridad en los acuerdos de paritarias entre la UTA y la patronal, ya que no forma parte de dichos convenios ni es responsable de su negociación. El argumento que esgrime es que su rol se limita a reconocer los costos del sector y mantener un diálogo con las cámaras correspondientes, por lo que -al no ser parte del conflicto- no puede intervenir de manera directa en él.
Este miércoles será la última instancia de negociación, y en caso de fracasar, el gremio alertó que será el "plazo final" que aceptarán para continuar con la discusión, previo a tomar una medida de fuerza que abarque un paro de servicios de colectivos.
El sindicato conducido por Roberto Fernández, en un comunicado publicado el jueves pasado, había dejado entrever la posibilidad de convocar a una huelga "ante las manifestaciones vertidas por los representantes del sector empresario que indican el no cumplimiento del acta acuerdo firmado por las partes con fecha 2 de febrero y que fuera homologada el 19 de ese mes, alegando no contar con fondos suficientes para ello por decisiones técnicas de la Secretaría de Transporte".
"La UTA se declara en estado de alerta, advirtiendo a la población que, de verificarse dicho incumplimiento a partir del próximo lunes 8 del corriente, se verá afectada la normal prestación del servicio público en el área del AMBA", habían especificado.