A partir de este miércoles, la línea Roca comenzó a funcionar con un diagrama especial en todos sus ramales durante, en principio, tres semanas, producto de una reparación a realizarse a la altura de Barracas, en el ingreso a Constitución. En el primer día de obras y esquema provisional, los usuarios sufrieron las consecuencias de las demoras, que implicaron grandes complicaciones a la hora de abordar las formaciones. 

La construcción reviste carácter de urgente, según informó el martes pasado Trenes Argentinos, ya que es "fundamental para poder garantizar la seguridad operativa", en un sector en el que circulan más de 600 formaciones por día.

En ese contexto, se vivieron varios escenarios de caos en las distintas estaciones y dentro de las formaciones que recorren el sur del Conurbano bonaerense.

Los vagones, colapsados de gente como consecuencia de las menores frecuencias.

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Después de que la empresa detallara que los servicios "sufrirán una reducción del 30% en su cronograma habitual" ya que "operativamente es imposible realizar la tarea sin afectación", en pocas horas se pudieron ver los trastornos que le ocasiona a los pasajeros, pese a que la secretaría de Transporte de la Nación dispuso la presencia de micros para unir las estaciones Plaza Constitución y Temperley. 

El desastre a la hora de intentar subir a los trenes (Video: @PWolovich).

La obra en sí consiste en una serie de remodelaciones en el arco 21 del viaducto Barracas, a la altura de la calle California. Se trata de un puente que fue construido durante la década de 1920 y cuya estructura es de mampostería -un método obsoleto que fue reemplazado por el uso de hormigón en las obras de infraestructura de envergadura-, según detalló la empresa.

En tanto, este cambio de frecuencias se produce luego de que el valor del pasaje se encareciera un 53,84% esta semana, por lo que el boleto pasó de $130 a $200 para aquellos usuarios que cuentan con SUBE registrada.

El monto a pagar, según la Resolución 02/2024 de la Secretaría de Transporte, publicada el último lunes, es más elevado para aquellos usuarios no hayan hecho la inscripción, quienes deben desembolsar $400 por el mismo tramo. Abonar en efectivo por ventanilla implicó un incremento del precio a $640, mientras que a los beneficiarios de la Tarifa Social les cuesta $90.