Oscars 2018: lo mejor no fueron los premios
"Esta es una noche para el positivismo”, expresó Jimmy Kimmel al abrir la ceremonia de los Oscars 2018. Aunque no fue muy exitoso: los números están diciendo que se trata de la audiencia más baja de los últimos nueve años. De todos modos, no solo se ganaron estatuillas doradas. En una noche en la que no hubo sorpresas ni muchos chistes realmente divertidos, lo más importante fue el protagonismo del feminismo y la inclusión.
La ceremonia podría haber empezado de una manera turbulenta, teniendo en cuenta que Ryan Seacrest, a pesar de sus recientes acusaciones de abuso, cubrió la alfombra roja para E!. Muchos especularon que alguien le hiciera una escena, sin embargo, hicieron algo peor: muy pocas celebridades aceptaron ser entrevistadas por él y su transmisión terminó antes de lo normal.
Jimmy Kimmel empezó la noche con un discurso poniendo su atención en dos movimientos feministas que están muy presentes en este momento: "Time’s up” y "Me too”. También mencionó la importancia de las películas de superhéroes con protagonistas mujeres y de color, como fueron Wonder Woman y Black Panther.
Ese fue solo el comienzo para una fiesta que exhibió la diversidad a través de sus ganadores, presentadores y shows musicales. Incluso los latinos fueron muy representados: el mexicano Guillermo del Toro fue el gran protagonista; toda la fiesta giró alrededor de Coco, con el mejor número musical; y la película extranjera ganadora, "Una mujer fantástica", de origen chileno. Además, su protagonista, Daniela Vega, se convirtió en la primera mujer trans en ser presentadora, y lo hizo anunciando el número musical de "Call me by your name”, una película sobre una pareja gay.
Jordan Peele se convirtió en el primer hombre negro en ganar un Oscar como Mejor guión original por Get Out (¡Huye!). Al aceptar su premio, aseguró que había dejado de escribir el guión unas veinte veces porque pensó que era imposible. Su mensaje de aliento siguió presente en una pieza audiovisual que protagonizaron imágenes de mujeres, personas de color, gays y transgénero, junto a entrevistas con Kumail Nanjiani (The big sick), Greta Gerwig (Lady Bird), Ava DuVernay, entre otros, hablando sobre la importancia de la representación en las películas. Nanjiani dejó en claro que era hora de que hombres de tez blanca se puedan identificar con historias como la suya, con ascendencia Pakistaní, diciendo "yo lo hice toda mi vida”. Y Gerwig (que lamentablemente se fue a casa sin ningún premio) pidió a las mujeres que hagan sus propias películas porque ella las necesita.
También fue significativo el premio a Mejor corto de acción real porque la ganadora fue "The Silent Child”. El corto se trata sobre una niña sorda y la escritora del mismo, Rachel Shenton, aceptó el premio traduciendo lo que decía a lenguaje de señas, agradeciendo el lugar que le dieron para que su historia sea mainstream.
Hacia el final, a la hora de anunciar a la Mejor actriz, como es costumbre, debía hacerlo el anterior ganador a Mejor actor, en este caso, Casey Affleck. Sin embargo, el actor tiene varias acusaciones de abuso por lo que en su lugar, el premio fue entregado por Jennifer Lawrence y Jodie Foster, que hicieron un poco de humor con respecto a las muletas que llevaba Foster (producto de un accidente de sky). El momento rápidamente se convirtió en el mejor de la noche cuando la ganadora, Frances McDormand (Tres anuncios por un crimen), pidió a todas las mujeres nominadas que se levantaran de sus asientos y transmitió un emotivo mensaje (ver video).
Dicho todo esto, es mejor dejar de lado el premio al Mejor corto animado, Dear Basketball, con el poema del basquetbolista Kobe Bryant, quien fue acusado por violar a una mujer en 2003.