En medio de un clima tormentoso por la crisis económica, María Eugenia Vidal recuperó la iniciativa y utilizó la mañana del sábado para encabezar el último timbreo de julio, la fórmula más probada por Cambiemos.

Luego de conocerse que la caída de la imagen positiva del Presidente Mauricio Macri también arrastra la suya y de Horacio Rodríguez Larreta, la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, junto al intendente Gonzalo Peluso y al Subsecretario de Asuntos Municipales, Alex Campbell, caminó las calles del partido de Magdalena y dialogó con sus vecinos.

A menos de doce horas del anuncio de aumentos en las tarifas del transporte, Vidal decidió regresar a las bases de las estrategias políticas de Cambiemos y recorrer los barrios de la Provincia para contener a los bonaerenses.

El objetivo principal es claro: repuntar la imagen del cuadro más importante del PRO, que, luego de una crisis económica que dinamitó la credibilidad del electorado, necesita reposicionarse como una de las líderes positivas del cambio.

El repunte de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner en las encuestas (algunas la dan como ganadora ante Macri, incluso en ballotage) se convirtió en una verdadera amenaza para Cambiemos, que, además, deberá afrontar lo que resta del camino hacia octubre de 2019 en un clima de ajuste feroz.

Timbreos: recupera Mariu la iniciativa con la fórmula más probada por Cambiemos