Alberto Fernández aprovecha los fines de semana para disfrutar del verde de la residencia oficial en Olivos. Sin embargo, pese a las jornadas de distensión, el Presidente no deja de articular encuentros para mantener unido el Frente de Todos.

Una muestra de esa intención fue la reunión que mantuvo con los gobernadores de Tucumán y Santiago del Estero, Juan Mazur y Gerardo Zamora, respectivamente. El ministro del Interior, Eduardo Wado de Pedro, también se sumó al cónclave.

"Una reunión distendida", fue la calificación que dio un colaborador de Manzur para describir la reunión de los jefes provinciales en la Quinta de Olivos. Días atrás, el ex ministro de Salud había viajado a Buenos Aires para un encuentro cara a cara, en la Rosada, con Santiago Cafiero.

Misma estrategia había adoptado Zamora, ya que también pasó primero por el "filtro" del jefe de Gabinete. El 20 de enero pasó por el despacho del nieto del histórico dirigente. Esa vez también se sumó de Pedro.

El paso de los gobernadores por la Rosada, una postal repetida.

"No hay fondos" (salvo excepciones)

El principal pedido de los gobernadores fue el único que no trascendió oficialmente. Es que tanto Santiago del Estero como Tucumán no le escapan al común de las provincias sobre la situación fiscal.

Y, por eso, desde Zamora y Manzur -según contaron cronistas que siguen el día a día de los jefes provinciales- salió el pedido de una ayuda financiera con créditos de Nación. O, al menos, una asistencia para obras públicas en el interior de los distritos.

La respuesta del Ejecutivo habría sido la misma que se viene repitiendo: "Salvo contadas excepciones, no hay plata", comentan desde el Gobierno.

Entre las excepciones cabe destacar el "rescate" realizado por el Frente de Todos a cinco provincias, a sólo unos días que Fernández comande la Rosada. Tucumán fue uno de los cinco distritos.

Tarjeta alimentaria

El otro eje de la conversación fue explicitado en las cuentas de Twitter tanto de Zamora como de Manzur. Es que para este mes se prevé el desembarco del programa Plan Nacional contra el Hambre que lleva adelante el ministerio de Desarrollo Social, comandado por Daniel Arroyo.

La intención es que alrededor de 35.000 mil tarjetas alimentarias del programa nacional lleguen a Santiago del Estero, con montos que van desde 4.000 a 6.000 pesos, de acuerdo al beneficiario.

En Tucumán, por caso, ya empezó a funcionar este plan de Desarrollo Social. De acuerdo a los números que maneja la Provincia, se distribuirán unos 70.000 plásticos, para un universo estimado en 130.000 niños.

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Entre la charla también se discutió la estrategia de Consejo Federal de Seguridad, inaugurado en territorio de Manzur la semana pasada. Queda por ver si el gobernador hizo mención a la filtración de un audio suyo durante el evento. "Vos poné a alguien que los escuche y nosotros hacemos lo que queremos", había dicho ¿en broma? a la ministra de Seguridad, Sabina Frederic.