El Gobierno no se olvidó de los sindicatos. Tras varias semanas en las que el dólar dominó todos los temas de conversación en relación al Ejecutivo, la pequeña calma que trajo la baja de dos pesos de la moneda estadounidense planteó un panorama alentador para que el gabinete pueda atender otros asuntos fuera de lo económico.

En las últimas horas del viernes se conoció que Pablo Micheli fue echado de Asociación de Trabajadores del Estado (ATE). La decisión estratégica, que públicamente fue responsabilidad de Hugo "Cachorro” Godoy, marca un nuevo capítulo en la lucha del presidente Macri contra "la mafia sindical”.

En un giro de los hechos, supuestamente orquestado entre el sector de Víctor De Gennaro y el ahora secretario de Trabajo Jorge Triaca, la CTA Autónoma ahora se centraría solamente en un único líder. "Es una nueva actitud de colaboracionismo con el Gobierno de Mauricio Macri”, acusaron desde el sector que respondía a Micheli.

En un año de ajuste y con las elecciones ya en el horizonte, es necesario para el Ejecutivo evitar protestas en las calles y desean anticiparse a los problemas tratando de controlar las estructuras sindicales del país.

Sin embargo, mientras la CTA Autónoma se ajustaría a un acuerdo con Triaca, hace sólo unos días, la CTA de los Trabajadores volvió a elegir con el 89% a Hugo Yasky como secretario general para un nuevo mandato de cuatro años. De esta forma, se profundiza el perfil kirchnerista y combativo del gremio opositor.

Retoma el Gobierno su lucha contra los sindicalistas para evitar sobresaltos en año electoral

Dentro de este panorama, se suma la posibilidad del paro general anunciado por la CTA para el 25 de septiembre en el que también se sumaría Camioneros. Hugo Moyano, la figura opositora sindical que más importancia tiene en estos últimos días, decidió salir a aclarar sus dichos esta mañana en Radio Mitre.

"La frase que dije que Macri se quiere rajar, me lo dijeron desde adentro del Gobierno”, explicó a Marcelo Bonelli remarcando su poder fuera y dentro del Ejecutivo. Ademá, marcó su diferencia de opinión en cuanto a las medidas económicas que están tomando: "Ir al fondo para buscar solución es ir más al fondo”, pero aclaró que no desea una partida precipitada: "Todos queremos que Macri termine su mandato”.

Con estos movimientos en el tablero, se va delineando un mapa sindical con la CTA Autónoma cercana al gobierno y, del otro lado del panorama, Camioneros y la CTA de los Trabajadores duramente críticos al futuro macrista.