Reaparece Kicillof contra los economistas de Macri: "Fracasaron en la lucha contra la inflación"
En diálogo exclusivo con elCanciller, el ex ministro se refirió a los números económicos del primer par de años de Cambiemos. "Una bancarrota teórica, conceptual, práctica y política", definió.
En un diálogo exclusivo para elCanciller.com, el diputado nacional del Frente para la Victoria, Áxel Kicillof, habló sobre la lucha de Cambiemos contra la inflación y el endeudamiento del país en los dos años del presidente Mauricio Macri. Además, el ex ministro de Economía afirmó que el actual Gobierno "no quiere industria nacional".
—La inflación en 2017 cerró en 24,7%, ¿está perdiendo el oficialismo la batalla para combatirla?
—La lucha del Gobierno con la inflación es uno de sus fracasos más rotundos. Macri gana las elecciones en 2015 con spots y participaciones en programas donde dice que la inflación es "el problema más simple” que tiene para resolver. En el primer año de gobierno -2016- tiene una inflación de 42 puntos y bate el récord inflacionario de 2002, es decir, después de la crisis y la devaluación.
—¿Cuáles son los errores que comete el Gobierno?
—Ni Macri ni sus funcionarios saben cuál es el origen de la inflación en la Argentina. Por eso tenemos dos problemas: no sólo no logran bajarla sino que los métodos que usan para combatirla tienen cualquier efecto menos ese -y todos los efectos que tienen son malos-. En 2016, Macri genera una fuerte devaluación- sumada a un incremento de tarifas- y da lugar a dos estímulos inflacionarios: inflación de costos e inflación cambiaria, pero sus economistas niegan que esto vaya a ocurrir porque -tomando una teoría económica que absolutamente nadie a escala mundial comparte- opinan que la inflación es solamente un fenómeno monetario que puede combatir el Banco Central con la tasa de interés. En 2017 volvió a cometer el mismo error y todo esto derivó en una bancarrota conceptual, teórica, práctica y política con la inflación más alta del decenio.
—¿Por qué las metas del Banco Central están por debajo de las estimaciones del mercado?
—Lo hacen con el sólo propósito de impedir que los salarios y las jubilaciones alcancen a los precios. Por ahora, la inflación en la Argentina de Macri, que yo creo que es mucho más alta de lo que están mostrando, ha servido para deteriorar las condiciones de vida de los trabajadores.
—Después de dos años sin resultados, ¿por qué el Gobierno no cambia el plan antiinflacionario?
—El Banco Central mantiene alta la tasa de interés no por los motivos que dice -porque ya debería haberse dado cuenta de que no sirve y la refutación está evidente-, sino por otras dos cuestiones: generar una rentabilidad alta para los bancos y los inversores extranjeros y especulativos, y para evitar una devaluación. Mantener alta la tasa de interés es una forma de evitar una corrida cambiaria.
—¿El tipo de cambio es motivo de conflicto entre Sturzenegger y la pata política de Cambiemos?
—Dentro del propio Gobierno, el valor del dólar es un motivo de controversia y de polémica, por eso a veces ganan las fuerzas que piden devaluación y otras las que piden atraso cambiario. Macri tenía una política de dólar barato y eso lo sostiene con la especulación financiera que le permite la tasa que pone Sturzenegger.
—¿Es preocupante la velocidad del endeudamiento del Gobierno?
—El endeudamiento que está generando Cambiemos es un escándalo mundial. No hay país que se haya endeudado tanto -en términos históricos y absolutos- en tan poco tiempo. ¿Para qué? Solamente para sostener la fuga de capitales y la especulación financiera, sin generar ningún beneficio más allá de algunos grupos minúsculos. Es el endeudamiento más fútil, estéril y escandaloso del que se tenga memoria, incluyendo épocas nefastas de la economía argentina.
—La capacidad instalada marcó récord en la era Macri, ¿es un dato alentador?
—Tanto este como cualquier otro indicador todavía está por debajo de los niveles del 2015. Con el discurso de que venía a mejorar las cosas está generando enormes perjuicios para el sector industrial. Cuando se les cae la careta y hablan con sinceridad, uno se da cuenta de que Macri no quiere industria nacional. La consideran ineficiente, innecesaria y les genera problemas con otros países -en los que quiere convertirse en importador-. Lo que busca Macri -y está logrando- es la desindustrialización del país.