Planta Lavagna a la cumbre de Alternativa Federal y enfrenta a Macri en la pugna por Lousteau
La negativa de Lavagna a participar muestra los fraccionamientos que aparecieron en el último tiempo en la que busca ser la tercera fuerza electoral. El economista reclama que lo buscaron para ser candidato -no lo buscó- y ahora le exigen que compita en unas internas que considera contraproducentes en el actual contexto político y económico. Massa, que siempre mostró a Lavagna como su carta de presentación, como el mejor del plantel que el tigrense había reunido, ahora ve la emancipación del ex ministro de Néstor Kirchner como una deslealtad.
La pelea por Lousteau
El viernes pasado Macri cenó con Martín Lousteau y en la misma semana mantuvo con él una conversación telefónica. En su columna de este jueves, el editorialista Carlos Pagni, escribió: “¿Macri está estudiando a Lousteau como eventual vicepresidente? Alguien cercano al Presidente responde: "De eso no se habló. Pero no lo descartaría por completo. Y hace tres semanas sí lo descartaba". Hay un dato objetivo. A Macri siempre le encantó el estilo de Lousteau, sobre todo su capacidad para explicar cuestiones complejas en la prensa. Hace por lo menos tres meses que uno de sus excompañeros en el Newman hace apuestas a favor de esa elección”.
Lavagna no quiere a Lousteau de vice. Según consignó LPO, el economista de 77 años lo quiere compitiendo contra Horacio Rodríguez Larreta en la Ciudad de Buenos Aires. El objetivo es hacerle frente al PRO con un candidato que ya se ha probado contra Larreta y, al mismo tiempo, dar señales de armado de una fuerza nacional que supera al peronismo federal que encabeza Massa, incluyendo socialistas y radicalaes. De todos modos, Lousteau no es el único nombre que aparece para competir por ese asiento; también está dispuesto a jugar otro político azulgrana, Matías Lammens.
La reunión de Lousteau con Lavagna, el miércoles, refleja el tironeo que existe alrededor del joven economista. Las consultoras de imagen coinciden en que Lousteau representa un activo escaso en estas elecciones. En primer lugar, un nombre propio con más imagen positiva que negativa. Además, una intención de voto pequeña pero importante para el esquema de tres tercios que dictan las encuestas; y por último, es un político que suma sin restar, no produce fuga de votos.