Piquetazo nacional: incidentes entre policías y manifestantes en los puentes Pueyrredón y Saavedra
En medio de más de 500 cortes de organizaciones sociales que desafiaron el protocolo de Bullrich para reclamar por la falta de alimentos, el Gobierno desplegó a las fuerzas de seguridad y en el norte y el sur del límite porteño se produjeron disturbios.
La Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) y otras decenas de organizaciones de izquierda se movilizaron este lunes en diferentes puntos de la Argentina, con el foco principal puesto en la ciudad de Buenos Aires y sus accesos, en reclamo al Gobierno nacional "ante la falta de respuesta del gobierno por la emergencia alimentaria y el ajuste a la economía popular". En ese contexto, y frente a un imponente despliegue de las fuerzas de seguridad para asegurar el cumplimiento del protocolo antipiquetes, se produjeron incidentes entre manifestantes y policías en las inmediaciones de los puentes Pueyrredón y Saavedra, donde hubo al menos tres heridos.
La megaprotesta, en la que se plantearon más de 500 cortes y manifestaciones simultáneas en las 23 provincias y la Capital Federal, comenzó alrededor de las 10. En los límites de la Ciudad, los organizadores se ubicaron próximos a las principales arterias de ingreso, entre ellas las dos zonas clave donde se produjeron los disturbios y enfrentamientos. Hubo también epicentros en la Ruta 3, otras locaciones en torno a la General Paz y varios puntos del país.
Cerca de las 10:30, en Avellaneda, comenzaron a marchar cientos de personas, mientras la policía cumplimentaba la orden de no permitir el paso de las columnas por la arteria clave que conecta el sur del Conurbano con la Ciudad, lo que tensaba la situación a medida que pasaban los minutos y continuaba ese cara a cara. En el Norte, en tanto, estaba cortada la Avenida Maipú, y había varios efectivos apostados en las inmediaciones del acceso por General Paz, ambas partes en total quietud.
Casi de manera simultánea, se produjeron los primeros disturbios alrededor de las 11, cuando la Policía de la Ciudad decidió avanzar sobre los manifestantes que estaban apostados en la zona norte próxima a Avenida Cabildo, su continuación Maipú, y la General Paz, bajo el argumento de que debían liberar toda el área correspondiente a la jurisdicción porteña, por lo que corrieron con camiones hidrantes a quienes estaban allí apostados.
En el mismo momento, en la zona Sur se produjeron algunos encontronazos y los efectivos lanzaron gases lacrimógenos y rociaron con agua a quienes protestaban, mientras volaban algunos piedrazos desde las columnas que buscaban acceder al Puente Pueyrredón. Varias personas debieron ser asistidas y se confirmaron al menos tres heridos, entre ellos un trabajador de Canal 9 -que estaba realizando cobertura en el lugar- y dos miembros de la Prefectura que se descompensaron.
A las 14 se dio por terminada la "jornada nacional" pautada por las organizaciones sociales para "profundizar el plan de lucha frente a la falta absoluta de respuesta del gobierno ante la emergencia alimentaria y el ajuste a la economía popular", y se inició la desconcentración.
Participaron el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), que lidera Juan Grabois; el Polo Obrero, de Eduardo Belliboni; el Movimiento Evita, comandado por Emilio Pérsico; el Frente Darío Santillán, de Dina Sánchez; y la Corriente Clasista Combativa, de Juan Carlos Alderete.
Del otro lado operaron las fuerzas de seguridad, Policía Federal, de la Ciudad y Prefectura, en el marco del Protocolo Antipiquetes que diseñó y viene implementando la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, en tándem con la cartera que conduce Waldo Wolff en territorio porteño.
La relación entre los líderes sociales se tensó luego de que la Casa Rosada avanzara con la promesa de campaña del presidente Javier Milei de terminar con la intermediación en el caso de la provisión de ayuda social. A su vez, el clima entre ambas partes empeoró después de que la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, lanzara nuevas licitaciones para la compra de alimentos, algo que los sectores de la sociedad civil señalan que ha dejado sin sustento a muchas familias necesitadas.
En tanto, la gestión libertaria anunció que hará cumplir la norma que puso en vigencia meses atrás y que señala que, en caso de que un beneficiario de un plan se haga presente en la marcha y realice cortes, se le dará de baja automáticamente a ese beneficio.