En medio de la tensión existente entre el oficialismo y el PRO, que se agudizó en los últimos días, el presidente Javier Milei y el exmandatario Mauricio Macri volvieron a reunirse en la noche de este martes en la Quinta de Olivos.

El segundo encuentro entre ambos en menos de dos semanas se produjo luego de que el partido fundado por Macri no acompañara a La Libertad Avanza en la Cámara de Diputados en el decreto que otorgó $100.000 millones para fondos reservados de la SIDE.

El mandatario nacional recibió al líder del PRO para cenar en la residencia oficial, en una reunión concertada a último minuto y de la que no trascendió demasiada información.

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La idea de invitar y compartir con Macri un nuevo momento a solas buscó bajar la tensión que se acrecentó en los últimos días.

"Hay una mezcla de ingratitud con gente confundida. Lo hemos visto claramente. No son traidores, son ingratos", analizó el vocero presidencial Manuel Adorni la semana pasada tras el posicionamiento del PRO.

La decisión de Macri de no apoyar al Gobierno fue un mensaje hacia adentro del partido y también hacia la Casa Rosada. Aunque también hubo el último domingo un comunicado público del partido que fundó y lidera el exmandatario en el que reiteró su respaldo a la gestión económica libertaria y al inminente veto presidencial a la ley que sube los haberes de los jubilados, pero marcó "discrepancias" respecto de algunos aspectos "institucionales".

Desde la llegada de Milei al poder, el PRO lo acompañó en todas las votaciones, aunque en los últimos tiempos comenzó a marcar diferencias con los libertarios.

Esa postura se enmarca en la discusión que se da puertas adentro del espacio amarillo, que se debate entre tomar distancia del oficialismo o avanzar hacia una fusión o alianza con La Libertad Avanza el próximo año.

En 2025, el oficialismo no arriesga bancas y su objetivo es hacer la mejor elección posible que lo deje bien posicionado en ambas Cámaras para tratar los proyectos de la segunda mitad del mandato de Milei. Con ese objetivo como rumbo, los libertarios buscan mantenerse cerca de Macri y del PRO, al menos hasta que sea más claro el panorama electoral.