La magnitud de la victoria de Alberto Fernández en las PASO abre interrogantes que exceden al cambio del mando del bastón presidencial. El candidato del Frente de Todos, cuando se proyectan los votos en blanco, araña el 50%. Eso sin contar que la posterior devaluación del peso -otro golpe económico a la gestión de Mauricio Macri- podría acentuar la diferencia de cara a octubre. Para Joaquín Morales Solá, el peronismo puede quedarse con los tres poderes del estado.

"Un triunfo abrumador del peronismo en octubre podría darle la mayoría en las dos cámaras del Congreso. Esa mayoría conformaría luego el Consejo de la Magistratura, que es donde se cocinan las designaciones y las destituciones de los jueces. En un solo día el peronismo se quedaría con el control de los tres poderes del Estado", señala el editorialista.

Morales Solá consigna que esa situación "no es buena bajo ningún gobierno, cualquiera sea su signo político", ya que la República "conlleva a un sistema de pesos y contrapesos que son necesarios". En ese sentido, alerta que, a partir de octubre, podría quedar configurado un poder de gran magnitud a disposición de Alberto Fernández.

Además, el columnista de La Nación destaca el ejercicio del actual presidente en este sentido. "Macri tiene pocos pergaminos económicos para mostrar (...) Pero puede exhibir una gestión en la que se respetaron las libertades y el principio de la división de poderes. No hubo escraches y se instaló un diálogo entre adversarios, más que nada en el Congreso. Podrá decirse que ese diálogo fue forzado por las circunstancias (estuvo siempre en minoría), pero lo cierto es que existió por primera vez en mucho tiempo".

"Ese legado debe sobrevivir aunque Macri no sobreviva como presidente después de diciembre", concluye.