Javier Milei protagonizó este martes una nueva polémica en el cierre del G20 celebrado en Río de Janeiro, tras ausentarse de la foto familia que los organizadores buscaron repetir tras las ausencias de Joe Biden, Giorgia Meloni y Justin Trudeau en la imagen tomada el lunes. El Gobierno todavía no dio una explicación oficial.

La foto estaba originalmente coordinada para el lunes. Sin embargo, el presidente de Estados Unidos, la primera ministro de Italia y su homólogo canadiense no llegaron a tiempo, por lo que los organizadores intentaron juntar a todos en un nuevo retrato. El único de los mandatarios en ausentarse, esta vez, fue el libertario.

El hecho generó cierto malestar en Brasil y sucedió luego de varios encuentros distantes entre el mandatario argentino y Luiz Inácio Lula da Silva.

El recibimiento inicial del lunes, que fue con abrazos y sonrisas con el resto de los funcionarios, cumplió con lo mínimo que indica el protocolo. Incluso, la foto, de la cual participó también la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, fue la única sin estrechez de mano.

TE PODRÍA INTERESAR:

Asimismo, si bien el presidente argentino decidió adherirse a la Alianza contra el Hambre y la Pobreza, impulsada justamente por su par brasileño, no firmó todo lo relacionado a la Agenda 2030 de las Naciones Unidas, siendo la primera vez que el Gobierno nacional se diferencia de esta forma.

Además de participar en la cumbre, el líder de La Libertad Avanza continuó su actividad con diversas reuniones bilaterales. Se juntó con el presidente de China, Xi Jinping; con la titular del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, y con el primer ministro de la India, Narendra Modi.

Sobre la reunión con el líder del Partido Comunista de China, el Gobierno aseguró que hubo interés por parte del país asiático "de incrementar el comercio con Argentina" y aseveró que "ambas naciones" acordaron seguir trabajando en los proyectos que "beneficien" a las dos economías. 

Antes de regresar al país, Milei también se reunió con el gerente general de la empresa italiana Enel, Flavio Cattaneo.