Luego de que Alfredo Cornejo deslizara la idea de que Mauricio Macri podría no ser el candidato presidencial de Cambiemos, reapareció Marcos Peña para bajarle línea al radicalismo e impedir segundas lecturas electorales.

Tras varias semanas de trabajo para borrar del mapa al “Plan V”, ahora el jefe de Gabinete emprende un nuevo y arduo camino en el marco de la campaña por la reelección presidencial de Macri: eliminar la posibilidad de que Macri tenga competencia interna en las PASO.

"No hay que descartar esa chance. Tenemos que estar abiertos a todas las posiblidades, todas", había dicho el gobernador de Mendoza en diálogo con Luis Novaresio en una jornada de empresarios organizada por la Cámara de Comercio de Estados Unidos.

Le marca la cancha Peña al radicalismo y asegura que Macri no tendrá competencia en las PASO

Ese comentario explotó en el interior de Cambiemos y reavivó el conflicto entre la UCR y el PRO dentro de la coalición de Gobierno, por lo que desde la mesa chica del radicalismo llamaron a una reunión urgente con los principales armadores del partido.

En la noche del martes, el titular del Comité Nacional cenó junto a Mario Negri, Ernesto Sanz, Gerardo Morales, José Cano, Emiliano Yacobitti y Enrique "Coti" Nosiglia en un restaurante del centro porteño para negociar la habilitación de las PASO en octubre.

Atentos a las encuestas negras que no paran de florecer, el argumento que esbozan es que frente a Cristina Fernández de Kirchner, Macri maneja malos números, por lo que no debería ser el candidato de la fuerza. O al menos no el único.

Aunque en la noche del miércoles, el Jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta aclaró en TN que “el candidato de Cambiemos tiene que ser Mauricio Macri” pero no negó la existencia de otras posibilidades, sí aclaró que la idea de la disolución de la alianza fue un rumor constante durante la gestión pero que, sin embargo, con el radicalismo “hay muy buen diálogo”.

En la misma línea pero con mayor contundencia, Peña dio algunas definiciones y suprimió fantasmas. "A un presidente no se lo somete a una interna", apuntó en diálogo con Nicolás Wiñazki en TN.

En tanto, desde la UCR insisten con la idea y esperan llevar a la Convención del 27 la propuesta para ampliar la coalición para obligar al presidente a competir con Martín Lousteau, en caso de que acepte encabezar su fórmula.