La última semana de noviembre será clave para los próximos cuatro años. El presidente electo, Alberto Fernández, anunciará los nombres de quienes formarán parte de su gabinete. Si bien todavía no hay ninguno confirmado, todo indica que Felipe Solá, Wado de Pedro y Santiago Cafiero tendrán su lugar.

La incógnita más grande gira en turno al Ministerio de Economía. En su panorama económico de este viernes en Clarín, Marcelo Bonelli puso todas las fichas en Matías Kulfas, quien fue director del Banco Nación desde 2008 hasta 2012. Además, es uno de los hombres que acompaña a Alberto a las distintas reuniones, como al encuentro con la cúpula de la Unión Industrial Argentina (UIA) y el debate en Santa Fe.

“Kulfas mantiene absoluto silencio y se empapa de todos los datos económicos: su diagnóstico es duro y severo sobre lo que le tocaría administrar. Su nombre hoy está firme, pero el proceso económico es dinámico y un mes de plazo es eternidad en la Argentina. Kulfas -prudente- solo responde tres palabras, frente a consultas de hombres de negocios. Así lo dice: ‘No está definido’”, subrayó Bonelli.

En Radio Mitre, Marcelo Longobardi fue por otra vía y aseguró que la pulseada la habría ganado el ex secretario de Finanzas, Guillermo Nielsen.

Guillermo Nielsen. Foto: Damián Dopacio/NA.

Otro nombre que suena con fuerza es el de Cecilia Todesca, hija del actual director del Indec, Jorge Todesca, quien acompañó a Alberto a los dos debates presidenciales. Kulfas y Todesca forman parte del equipo técnico designado por el ex jefe de Gabinete kirchnerista para coordinar la transición en materia económica con el gobierno de Mauricio Macri. Ella fue jefa de Gabinete del Banco Central en momentos en que Kulfas era gerente bajo la gestión de Mercedes Marcó del Pont.

A ellos se le suma el ex vicepresidente del Banco Central, Miguel Pesce, reconocido dirigente radical. Hoy, es el encargado de estudiar las reservas del Banco Central de cara a la asunción del 10 de diciembre

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Por el momento, la silla del próximo ministro de Economía sigue vacante. Previo al triunfo en las elecciones generales, Alberto aventuró: “Quisiera tener una Cancillería donde lo más importante sea el comercio exterior. También quiero un ministro de Economía fuerte, que pueda resolver y pueda decidir. En la presidencia de Néstor (Kirchner) aprendí de Lavagna, que unificó el ministerio”.