En un escrito de 19 páginas en las que detalló los motivos por los que denuncia a Alberto Fernández por "lesiones graves doblemente calificadas por el vínculo" y "abuso de poder y de autoridad", Fabiola Yañez reveló ante la Justicia que sufrió "violencia reproductiva", instigación a "un aborto" y "cachetazos casi diarios" en el contexto de un hostigamiento permanente desde 2016.

Yañez presentó el lunes su primer escrito en la causa judicial que se abrió tras la denuncia por violencia de género, en el que ratificó la acusación y afirmó haber sido víctima de "lesiones graves doblemente calificadas por el vínculo y perpetradas en el marco de violencia de género con abuso de poder y de autoridad". Este martes, desde las 10, está previsto que amplíe sus dichos a través de la plataforma Zoom, desde Madrid, frente al fiscal Ramiro González.

Respecto de una gestación previa a la del actual hijo de ambos, en el marco del primer tiempo de su noviazgo y convivencia, la denunciante señaló ante la Justicia: "Comencé a sentir los primeros síntomas del embarazo y ni se lo podía comentar porque para él no existíamos, ni yo ni ese bebe. Y ahí caí en quizás- una de las más graves formas de violencia, la reproductiva, ya que a través de sus acciones e incluso sus omisiones (silencio, abandono, desprecio, reproches), fue vulnerando mi autoestima, mi autonomía, mis derechos reproductivos, por medio de su coacción, llevándome a tomar la terrible decisión de abortar a mi hijo, y generándome así, graves daños psicológicos y emocionales que persisten hasta hoy".

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"Antes que lo hiciera, era tal su perversión que le dijo al hijo que estaba embarazada, para después responsabilizarme a mí del aborto", agregó la ex primera dama en referencia a Estanislao Fernández, quien hoy tiene 29 años y es producto de la relación del exmandatario con una pareja anterior.

En otro tramo del texto -que aseguró que ampliará al efectuar su "declaración testimonial"- la denunciante señaló que "los   maltratos, hostigamiento, desprecio, agresiones, golpes resultaban ser una constante" y añadió que "por su habitualidad dejaron indudables secuelas de carácter psicológico". "Me obligaron en diferentes periodos de tiempo a llevar adelante tratamientos psicológicos y psiquiátricos, incluso con toma de mediación", puntualizó Yañez.

"Todo ello sumado a las lesiones físicas temporales por golpes que se pueden ver en las fotos que se adjuntan, en brazo, ojo y otras situaciones como cachetazos casi diarios en contexto de violencia verbal que terminaban habitualmente en un cachetazo como fin de la discusión y pese estar mi hijo de solo 2 años o menos, en una habitación cercana", reveló la entonces mujer de quien gobernó la Argentina entre 2019 y 2023.

Según detalló Yañez, quien solicitó además ser querellante en la causa, los episodios de violencia iniciaron en 2016 y avanzaron en varios planos, no solo el físico. El documento, que llevó su firma certificada y la de su abogada, Mariana Gallego, consta de precisiones de una vida diaria en la que la denunciante profundizó acerca de las lesiones y los abusos de autoridad de los que acusa a Fernández.  

En otro apartado, consignó que se trata "de un delito continuado, constituido por una serie de acciones u omisiones" y agregó en referencia a ello: "Recordemos que estos hechos comenzaron en el departamento que compartíamos en Puerto Madero en el año 2016 y terminan con los llamados intimidatorios y permanentes efectuados por el imputado desde el mismo departamento".

"Estamos en presencia de un caso de comisión basado en una relación de poder, que le permitió al agresor, máxima autoridad del país, mientras ostentaba el cargo de Jefe de Estado, y aun antes, cometer tan terrible delito, ya que los hechos fueron cometidos por el agresor desempeñando un cargo público, contra una mujer, su pareja conviviente y madre de su hijo, la Primera Dama de la Nación, y en una residencia destinada a la vivienda para quien ejercía ese cargo público", sentenció la denunciante.

La presentación se hizo en el consulado argentino en Madrid y fue enviado de manera virtual al juez federal Julián Ercolini y al fiscal González.

Por su parte, el acusado permanece recluido en el departamento del piso 12 del edificio River View, en Puerto Madero, y el viernes último designó a la abogada Silvina Carreira para que lleve adelante su defensa. Finalmente, se conoció la entrevista que brindó al diario El País y que se esperaba hace días, en la que negó haber golpeado a Fabiola ni a ninguna mujer: "Estoy siendo acusado de algo que no he hecho".