El oficialismo encara una semana compleja en el Senado y busca evitar tres derrotas mediante acuerdos con los dialoguistas
El Gobierno se enfrenta al eventual aumento del presupuesto universitario y al rechazo del DNU por los fondos millonarios para la SIDE. A esto se suma la lucha por modificar el proyecto de la Boleta Única de Papel.
Mientras la oposición busca revertir en Diputados el veto de Javier Milei a la reforma jubilatoria, el oficialismo se prepara para una semana compleja en el Senado, en donde el próximo jueves desde las 14 apuntará a evitar tres derrotas legislativas al hilo. Mientras tanto, avanzan las conversaciones entre los referentes libertarios y los miembros de los bloques más dialoguistas del Congreso.
Los cañones de La Libertad Avanza estarán puestos en impedir la inminente aprobación del proyecto que incrementa el presupuesto universitario y el rechazo al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que otorga fondos millonarios a la secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE). A estas amenazas para la gestión podría sumarse un revés a la iniciativa de la Boleta Única de Papel (BUP), que naufraga desde enero en la Cámara alta.
La sesión de esta semana fue pactada en la reunión de Labor Parlamentaria del pasado miércoles 4 de septiembre en el despacho de la vicepresidenta, Victoria Villarruel. Hasta ese entonces, había incertidumbre sobre el plenario, ya que las tres temáticas socavaban intereses contrapuestos entre los diversos bloques.
Por un lado, el kirchnerismo pujó en soledad para que se sesionara el pasado jueves por el financiamiento universitario -que incluye un incremento para docentes y no docentes- y el decreto que otorga $1.000 millones a la SIDE, ya rechazado en la Cámara baja.
En tanto, la BUP -con reformas- fue impulsada por el Gobierno y Villarruel y sería la única esforzada victoria que podrían anotarse los libertarios que, en tándem con los presidentes de las bancadas aliadas, decidieron posponer su tratamiento en el recinto para intentar conseguir los votos necesarios para su aprobación.
Al respecto, voces con llegada a la oficina de la titular del Senado señalaron a la agencia Noticias Argentinas que se intentó "proteger al Gobierno de una derrota y mantener los lazos sanos con los bloques dialoguistas".
En las últimas semanas, enviados de la jefatura de Gabinete a cargo de Guillermo Francos -hospitalizado este domingo por un "cuadro gastrointestinal agudo"- recorrieron los pasillos del Palacio Legislativo en busca de consensos para afinar las modificaciones al proyecto que contó con un dictamen mayoritario firmado por la Unión Cívica Radical (UCR), el PRO, La Libertad Avanza y algunos federales.
Debido a los cambios que se incorporarían en la Cámara alta, de aprobarse la iniciativa, volvería a Diputados para que acepten o rechacen esas modificaciones en el sistema electoral.