Horas después de que el kirchnerismo pidiera a la vicepresidente Victoria Villarruel que convoque el jueves próximo a una sesión especial en el Senado para tratar la destitución de Edgardo Kueider -detenido en Paraguay por "tentativa de contrabando" de algo más de USD 200.000- y de que diputados de ese mismo espacio reclamaran la creación de una comisión que investigue si el oficialismo compró votos para lograr la aprobación de la Ley Bases, el Gobierno redobló la apuesta y amenaza con promover la expulsión de legisladores que tengan causas abiertas en la Justicia.

Según fuentes libertarias, el oficialismo ya tiene apuntados a diputados y senadores que están siendo investigados judicialmente. En esa lista, comentaron, hay varios de Unión por la Patria, como Santiago Cafiero, Victoria Tolosa Paz, Máximo Kirchner, Oscar Parrilli y Rodolfo Tailhade.

"¿Usted está a favor de destituir a todos los diputados y senadores que tengan causas judiciales?", preguntó en la noche de este viernes el vocero presidencial, Manuel Adorni, al abrir una encuesta virtual en su cuenta personal de X.

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De acuerdo a algunos trascendidos, después de la doble ofensiva del kirchnerismo, espacio que llevó a Kueider al Senado de la Nación, el Ejecutivo tiene la firme intención de llamar a sesiones especiales en ambas cámaras el próximo jueves para tratar las respectivas destituciones. 

La fecha no es azarosa, sino que es la que pidió este viernes el bloque de senadores de Unión por la Patria para llevar a cabo una sesión especial en la Cámara alta que trate la expulsión del legislador por Entre Ríos, quien cumple prisión domiciliaria en un exclusivo departamento de Asunción junto a su secretaria, Iara Guinsel Costa, ambos acusados por el mismo delito de contrabando de divisas.

Por su parte, fuentes del kirchnerismo consideraron "ridículo" el planteo de La Libertad Avanza y señalaron que ni Cafiero ni Tolosa Paz, por citar dos de los casos, tienen causas abiertas en la Justicia. 

Justamente, quien se desempeñó primero como jefe de Gabinete y posteriormente como canciller durante el Gobierno de Alberto Fernández fue uno de los firmantes de un proyecto de resolución presentado por diputados kirchneristas para que se cree una comisión que investigue si el oficialismo compró votos para aprobar la primera gran normativa de su gestión.

Tras anoticiarse del escándalo de la detención en Ciudad del Este del actual integrante del bloque Unidad Federal en el Senado, tanto el kirchnerismo como la izquierda se apuraron en reforzar la hipótesis del supuesto pago de coimas a legisladores aliados por parte del Ejecutivo para conseguir la sanción de la Ley Bases.

Quien primero deslizó esa teoría fue la expresidente Cristina Kirchner, que, a través de X y en un posteo titulado "Democracia tarifada", explicó que Kueider pasó a "votar como libertario en el Gobierno de (Javier) Milei" y subrayó que Villarruel lo designó como presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado.

"El proceso de tratamiento y aprobación de la ley en cuestión, tanto en enero como febrero, y luego en abril, lográndose allí la media sanción y su paso a la Cámara alta, dejan un importante manto de sospecha sobre diversas instancias, eventuales implicancias y posibles irregularidades de forma que sólo pueden enmarcarse en los vicios de una actividad realizada a espaldas al pueblo y soslayando el principio de la transparencia", expresó el texto de los diputados K, firmado, además de Cafiero, por Paula Penacca, Carolina Gaillard, José Glinski, Tolosa Paz, Ricardo Herrera, Pablo Yedlin, Martín Aveiro, Jorge Romero, Andrea Freites y Nancy Sand.