A dos días del multitudinario acto electoral de Cristina Fernández de Kirchner, La Nación apuntó sus cañones contra la organización de la Feria del Libro por su jugada para el kirchnerismo en plena campaña.

En una dura editorial, LN disparó munición gruesa por haber permitido que aquello que debía ser "una fiesta de la cultura y del pluralismo" fuera reemplazado por una oda a la intolerancia, en el predio de La Rural, emblema del campo y la alta sociedad.

Con el hostigamiento a la periodista María Eugenia Duffard de TN como bandera, el diario fundado por Bartolomé Mitre catalogó como "desafortunada" la decisión de la Fundación El Libro de facilitar -y acondicionar- sus instalaciones para un acto de campaña

Es que, según La Nación, era previsible que el acto -e inexorablemente el discurso- de la expresidenta Fernández de Kirchner contrastaría con "el perfil del visitante habitual", alterado por "una militancia más sectaria que librepensadora".

A su vez, también rememoró otros episodios oscuros como el frustrado boicot a la presentación de Mario Vargas Llosa en 2011 (José Pablo Feinmann y Horacio González intentaron voltear su invitación al evento) y las manifestaciones de repudio a Pablo Avelluto durante esta edición y la del año anterior, en la que estuvo acompañado por su par porteño, Enrique Avogadro.

En línea con la editorial, Avelluto le reclamó a los organizadores, a quienes etiquetó como "cercanos al kirchnerismo", que aquella pluralidad de la que tanto presumen en sus discursos sea también llevada a la práctica: "La pluralidad no es algo solamente que queda bien declamarlo sino también hacerlo".

Finalmente, en aras de preservar el prestigio y la pluralidad de "un ámbito tan ligado a la cultura", La Nación instó a "revisar los estatutos que rigen la organización" de la Feria del Libro para evitar nuevos episodios similares. Es decir, a poner sobre la mesa la posibilidad de remover a la dirigencia actual de la Fundación El Libro.