Descarta Massa la unidad con Cristina, convoca a Lousteau al peronismo y exhibe su costado feminista
"Quiero ser el presidente de la Argentina del crecimiento para salir de este fracaso". Con esta afirmación, Sergio Massa no sólo zanjó su intención de desembarcar en la Casa Rosada, sino también echó por tierra los rumores que lo postulaban como candidato a gobernar la provincia de Buenos Aires, acompañado por la figura de Cristina Fernández de Kirchner en Nación.
Además de anticipar que insistirá en el Congreso con la ley que establece que los servicios de luz, agua y gas no pueden aumentar más que los salarios, el líder del Frente Renovador mostró su impronta feminista, en una entrevista con Infobae.
"Este es el siglo de las mujeres. Y del siglo de las mujeres Argentina tiene que salir con paridad de derechos entre hombres y mujeres. En Argentina el salario de las mujeres por la misma actividad que realizan hombres es un 24% más bajo", sostuvo, en tanto consideró que se debe cambiar el Código Penal para que los femicidios se castiguen con cadena perpetua.
El tigrense, en línea con el discurso de la alternativa a la polarización, abogó por un llamado a un gran acuerdo nacional que reúna a empresarios y sindicalistas. No obstante, al ser consultado por una eventual confluencia con Martín Lousteau, no dejó dudas en su respuesta: "¡Ojalá! Martín tiene mucho para aportar a la Argentina".
La estimación por el exministro de Economía es una novedad, pero a la vez es una jugada estratégica: el radical fue el único que logró discutir el poder del PRO en la Ciudad de Buenos Aires, cuando en la elección para jefe de Gobierno del 2015 cayó en ballotage ante Horacio Rodríguez Larreta por tan solo dos puntos.
De tinte progresista, las últimas encuestas ubicaron a la intención de voto de Lousteau para los comicios presidenciales en el 6%, una cifra que, aunada con los más de 20 puntos que concitan Lavagna, Urtubey y el propio Massa, podría servirle a Alternativa Federal para catapultarse en el ballotage.
En este sentido, le puso un moño a la alianza peronista y se diferenció de la expresidenta, al asegurar que están "construyendo una alternativa a Cristina Kirchner".