El paro de los docentes era la crónica de un final anunciado. Sin margen para la negociación, los gremios empujaron a sus pares a un paro a nivel nacional, motorizado por el titular de Suteba, Roberto Baradel, en el marco de la discusión paritaria y una batalla aparte en la provincia de Buenos Aires.

En este sentido, después de la finalización de las vacaciones de invierno, Baradel salió a bancar el paro de 48 horas y afirmó que "no se está violando la conciliación” obligatoria dispuesta por el Ministerio de Trabajo bonaerense dictado el último viernes.

"Estamos llevando adelante una medida nacional de Ctera. La adhesión a la conciliación, acatar o desacatar, como dice hoy algún diario, nada de eso hay. Esta medida no es violatoria de ninguna conciliación obligatoria porque no estuvo ni objetada ni cuestionada por las autoridades. Es una medida de fuerza nacional”, afirmó.

La tensión entre los sindicatos y la gobernación bonaerense está en su pico máximo. Después del rechazo de la oferta del 15%, Baradel rechazó la multa de $600 millones que las autoridades bonaerenses ya adelantaron que podrían aplicarle a su sindicato por parar en el medio de una conciliación.

"No es violatoria de ninguna conciliación obligatorio. Es una medida de fuerza de carácter nacional", dijo Baradel

"Con el tema de la multa quieren esconder que abandonaron a las escuelas en la provincia y en el país”, respondió el gremialista, y apunto contra la gobernadora María Eugenia Vidal. 

Antes, Eduardo López, secretario general de UTE y uno de los referentes de Ctera, había reclamado por la paritaria nacional. "Teníamos razón, sin la paritaria nacional se acaban nuestros salarios y el presente y futuro de nuestros alumnos”.

La medida de fuerza de Ctera impide la reanudación de clases luego de las vacaciones de inverno en la Capital Federal, Tierra del Fuego, Santa Cruz, Chaco, Corrientes y Buenos Aires.