El papa Francisco se reunirá con el dirigente Juan Grabois y representantes sociales de todo el planeta, en una cita especial que se llevará a cabo en la Santa Sede para conmemorar el décimo aniversario del primer Encuentro Mundial de Movimientos Populares. 

Esta iniciativa, promovida por el Sumo Pontífice desde los inicios de su papado, ha resultado una plataforma clave para el diálogo entre las organizaciones de la sociedad civil y la Iglesia católica.

El evento, que se celebrará el próximo 20 de septiembre, durará aproximadamente tres horas. Grabois, uno de los principales referentes del sector popular en Argentina, fue invitado a participar en calidad de miembro del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, uno de los organismos del Vaticano encargado de la organización de este tipo de encuentros.

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La década que cumple la reunión auspiciada por el argentino líder de la Iglesia brinda una oportunidad para reflexionar sobre la evolución de la labor conjunta entre las dos partes en estos diez años.

Grabois, quien participó del encuentro inaugural en 2014, mantiene una relación cercana con el Papa y es un firme defensor de los derechos laborales, especialmente de los trabajadores no formales. En aquel entonces, planteó que todo empleado, formal o no, debe recibir una remuneración digna, seguridad social y cobertura jubilatoria.

La celebración de esta nueva cita coincidirá con la vuelta de Francisco de una extensa gira por Asia, donde visitó países como Indonesia, Papúa Nueva Guinea, Timor Oriental y Singapur y reafirmó su compromiso con las "periferias" y su lucha contra el cambio climático. Su llegada a Roma está prevista para el próximo viernes 13 de septiembre, una semana antes del evento con los dirigentes sociales.

Entre los invitados destacados al simposio del que participará Grabois también se encuentran la psicóloga española Xaro Castelló, del Movimiento Mundial de Trabajadores Cristianos, y el economista brasileño Joao Pedro Stedile, ambos parte del grupo fundador de esta iniciativa.

La convocatoria al encuentro pone el foco en la importancia de "plantar la bandera de la paz en nuestra Casa Común", en referencia a la necesidad de proteger el medioambiente y fomentar la justicia social a nivel global.