El jefe de Gabinete, Marcos Peña, es el funcionario de Cambiemos con mayor cintura para enfrentar los micrófonos y contestar las preguntas de la prensa. Por eso, el cerebro del Gobierno salió a la cancha en medio de la tormenta cambiaria y después de los anuncios del presidente Mauricio Macri de pedir un rescate del Fondo Monetario Internacional. 

"El rumbo está claro y estamos convencidos de que vamos a salir fortalecidos de estas dificultades", aseguró en la conferencia de prensa en la Casa Rosada y buscó llevar "tranquilidad" a todos los argentinos para "evitar angustias y miedos" de una crisis cambiaria.

"Heredamos un desastre y aplicamos el camino del gradualismo”, afirmó, mientras consideró que "algunos quieren que resolvamos los problemas muchos más rápidos, pero eso implicaría un costo mucho mayor. Para algunos el gradualismo es insuficiente”, añadió.

"Este programa económico incorporó las herramientas de las últimas crisis que hubo en el país. No hay razones a prestar atención a los fantasmas que se quieren agitar", contestó a la pregunta de una de las periodistas acreditadas en la Casa Rosada.

"El gradualismo tiene que avanzar de forma permanente y no avanzar y retroceder. Tenemos una vulnerabilidad externa que nos perjudica todos los días”, explicó, sobre los vaivenes y los problemas financieros en todo el mundo en torno al dólar.

"Reiteramos nuestra convicción profunda que este camino, pese a las dificultades, termina en el desarrollo y crecimiento que tanto venimos teniendo los argentinos hace mucho”, confió el jefe de los ministros, y dijo estar "comprometido en cada uno de los rubros para transformar la Argentina”.

"Hay que tener cuidado con los falsos rumores. Hace un mes Lagarde vino acá y dejó en claro el gradualismo que viene llevando a cabo el Gobierno. No es cierto que la historia se repita siempre”, cerró en una conferencia que duró aproximadamente 50 minutos.

Ampliar contenido
Ampliar contenido
Ampliar contenido
Ampliar contenido