Con la carta de la vicepresidencia, convoca Macri al radicalismo para evitar fugas hacia Lavagna
En medio de la crisis económica, la UCR eleva reclamos al núcleo duro del PRO para ganar protagonismo dentro de la alianza Cambiemos. La silla que podría aflojar las tensiones entre las dos principales fuerzas de la alianza es la de la vicepresidencia, ocupada hoy por Gabriela Michetti. El presidente Mauricio Macri convocó a los radicales para limar asperezas de cara a las elecciones y el pedido podría aflorar nuevamente.
La irrupción de Roberto Lavagna en el escenario electoral complicó la estrategia electoral del gobierno nacional más allá de lo que podría significar una migración de votos de Macri hacia el economista. El ex ministro de Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner seduce, además, a los radicales desencantados tanto con la política económica del oficialismo como con el lugar “secundario” que ocupa la UCR en la toma de decisiones de Cambiemos.
"En principio, no estamos cerrados a nada. Vamos a poner sobre la mesa todos los temas que planteen los socios de Cambiemos. Estamos dispuestos a escuchar a todos. Hoy tenemos que enfocarnos en la gestión y resolver los problemas que siguen vigentes. Ya habrá tiempo de definir éstos temas electorales", afirmó a LA NACION el ministro del Interior, Rogelio Frigerio. En respuesta, Sappia calificó de "tardía" la convocatoria del Gobierno al radicalismo a un encuentro para definir la estrategia electoral de Cambiemos. "Ahora que el PRO está por perder las elecciones, se acuerda de la UCR. La reunión es tardía, me parece una falta de respeto, es patético", sostuvo el dirigente radical.
En ese sentido, Lavagna, con ideas políticas vinculadas al consenso, el desarrollo y la industria nacional, se erige ante el radicalismo como una alianza mucho más natural que la que presenta Macri. Un sector del radicalismo enemistado con la administración nacional -entre los que se destacan Ricardo Alfonsín y el presidente de la Convención Nacional de radicalismo Jorge Sappia- avanza en una ruptura con Cambiemos para acompañar al ex ministro de Economía. Lavagna busca ser candidato en una coalición que trascienda al peronismo. Además, ya fue candidato radical a la presidencia en 2007, cuando quedó atrás de Cristina Kirchner y Elisa Carrió.
Resultados de las elecciones presidenciales de 2007.
Quienes arman la estrategia electoral de Macri no quieren negociar la vicepresidencia. El equipo del presidente cree, en primer término, que el cargo debe ser ocupado por una mujer, una condición que el radicalismo, con los nombres que pone sobre la mesa, no ofrece. En segundo lugar, consideran que la elección de quien sea compañero de fórmula de Macri debe ser quien otorgue más votos a la boleta.
Según el diario La Nación, la vicepresidenta actual, Michetti, es el nombre que más seduce al oficialismo para volver a ocupar el cargo. Los motivos serían la fidelidad que tiene con el PRO y la imagen positiva alta en el núcleo de votantes de Cambiemos. Otros nombres que suenan para este cargo son las ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y la de Desarrollo Social, Carolina Stanley.
Por lo pronto, asoman dentro del radicalismo los dirigentes que piden la ruptura de Cambiemos. La semana pasada, el dirigente Federico Storani admitió que "no es una locura pensar que la UCR se vaya de Cambiemos". Por su parte, Ricardo Alfonsín cuestionó a los radicales que "le dicen todo que sí" al Gobierno y les advirtió: "Van a tener que rendir cuentas". Este miércoles, el presidente de la Convención Radical de la UCR no descartó que la UCR “rompa la alianza Cambiemos para apoyar a Lavagna”.