Bienes Personales: el Senado discutirá ¿dos proyectos en espejo?
El bloque del Frente de Todos consiguió el dictamen favorable para su versión del proyecto, pero la oposición votó en contra y presentó otro dictamen de minoría respetando el documento original.
En la mañana de este miércoles, el oficialismo consiguió el dictamen favorable de su versión de la reforma del impuesto de Bienes Personales en la Comisión de Presupuesto del Senado de la Nación. El proyecto ya cuenta con la media sanción en Diputados y se tratará en el recinto el próximo jueves 29 de diciembre. Pero además, hubo otro dictamen de minoría por parte de la oposición, que buscará retornar al documento original.
Cómo venía la situación
Lo que sucede en el Senado es el correlato de lo que pasó este martes en la Cámara de Diputados, cuando cerca del mediodía el Frente de Todos (FDT) consiguió dictaminar su versión –que incorporaba tres modificaciones– de la iniciativa original que había sido presentada, paradójicamente, por un senador oficialista y aprobada por unanimidad en la Cámara alta.
Aunque allí también Juntos por el Cambio (JxC) logró ratificar el proyecto que habían forzado a tratar la semana anterior, durante la discusión del Presupuesto 2022. Llamaron a una sesión especial, pero no consiguieron el quórum para darle inicio. Como gesto, la bancada dirigida por Máximo Kirchner decidió bajar al recinto para comenzar el debate, pero sobre el documento con modificaciones.
Ese fue el que finalmente se aprobó –por 127 votos positivos contra 126 negativos– y fue enviado de vuelta al Senado que, en caso de aprobarlo, le dará la sanción completa a la ley. Sin embargo, no está todo dicho en el recinto presidido por Cristina Fernández de Kirchner.
La vuelta a la Cámara de origen
En la Comisión de Presupuesto pasaron dos cosas: se aprobó el dictamen de mayoría propuesto por el oficialismo con las modificaciones incorporadas, y por otro lado, la oposición presentó un dictamen de minoría respetando los parámetros de la propuesta inicial. Ambos proponen una suba del mínimo imponible de $2 millones a $6 millones de patrimonio, y de los $18 millones a los $30 millones sobre la propiedad utilizada como vivienda propia.
La diferencia radica en que la nueva propuesta del oficialismo, además, sube las alícuotas de 1,25% a 1,5% para los que posean una riqueza mayor a los $100 millones; hasta el 1,75% para quienes superen los $300 millones. Además, grava los bienes en el exterior en un 2,25% y actualiza automáticamente el piso al final de cada año acorde a la inflación.
El oficialismo busca con ello reducir el impacto fiscal de la medida. Sin embargo, producto de esos puntos y de que el FDT incorporó durante la sesión un último ítem referido a la actualización del impuesto a las Ganancias por parte del Ejecutivo, JxC se opondrá también en la Cámara alta. El senador Martín Lousteau afirmó que no están de acuerdo con estos artículos, que suponen “una mala delegación de facultades” al Gobierno de turno.
Si bien lo que sucederá en el recinto de Cristina Fernández de Kirchner es incierto, hay indicios esperanzadores para el Gobierno. En las últimas elecciones, el FDT perdió la mayoría en esa Cámara y es probable que el interbloque opositor no aporte el quórum. No obstante, con el apoyo de dos senadores eventualmente aliados –Alberto Weretilneck, de Juntos Somos Río Negro, y Magdalena Solari Quintana, del Frente de la Concordia Misionero–, el bloque liderado por José Mayans podría llegar a los 37 legisladores necesarios para dar comienzo a la sesión.