Apuesta el establishment por la reelección de Macri, pero revela un plan B tras la crisis
Desde las sombras, el establishment ordena sus prioridades para las elecciones del 2019. Lo peor ya pasó, alientan en los pasillos de la Casa Rosada. Pero los hombres de poder coinciden en que aún puede haber coletazos de la economía que no permitirían que Macri llegase con todo el aire posible al año que viene.
Las cartas están sobre la mesa y el grupo selecto, conformado por políticos, empresarios y analistas, empieza a jugar su partido de candidatos. El plan A es el mismo de siempre: la reelección de Mauricio Macri. O bien, la posibilidad de que María Eugenia Vidal, la política que ostenta la mejor imagen, sea la elegida. Una continuidad oficialista.
Sin embargo, las dos peores semanas del oficialismo prendieron la luz de alarma y, lo que era una supuesta reelección asegurada, sembró interrogantes que tocaron la puerta del establishment. Allí, lo más probable es que el peronismo no logre alejar a Cristina de la discusión central, aunque en el PJ son más los que prefieren utilizar la figura de la ex presidenta como un piso para no desperdiciar su chance en las urnas. ¿Una señal alentadora para Macri?
¿Entonces? El operativo reelección que encararon Marcos Peña y Durán Barba para encaminar una nueva presidencia de Cambiemos se frenó bruscamente por los límites de la economía: el dólar explotó y superó los $25, el Banco Central debió salir a hacer malabares (imprecisos, por cierto) y "lo quieren hacer llegar a la orilla algo herido”, reveló a El Canciller una fuente importante que comparte almuerzos y debates con el Círculo Rojo.
Los diferentes actores del establishment hacen su juego, casi todos en coincidencia. Los principales banqueros, por ejemplo, están detrás de Macri. Por caso, Enrique Cristofani, mandamás del Santander Rio, se convirtió en el anfitrión perfecto del resto de las autoridades de las entidades bancarias. Martin Zarich (BBVA), Gabriel Martino (HSBC), Alejandro Ledesma (ICBC) y Gustavo Manrique (Macro) fueron las caras que estuvieron presentes.
El campo, por su parte, dibuja una polémica con la verborrágica Elisa Carrió pero sonríe por lo bajo y festeja la escalada del dólar. Alentados por los rasgos de la devaluación, los hombres de la soja y el trigo, a pesar de que habilitan críticas moderadas, no tienen mejor plan que entregarle nuevamente el bastón presidencial a Macri.
El sector que públicamente colocó en el peor lugar al Presidente en este último tiempo, y que también sintió los golpes efectivos de las políticas de Cambiemos, fue la UIA. En la voz de su presidente, Miguel Acevedo, consideran que lo "peor ya pasó”, pero reclaman un "mea culpa” por los errores que incentivaron la inestabilidad económica. En este aspecto, para el sector industrial es una preocupación la tasa de referencia que estableció el Banco Central del 40%.
¿Cuál es el plan B del Círculo Rojo? Miguel Ángel Pichetto, que propone una afinidad relativa con la Casa Rosada pero que no perdió la oportunidad de la debilidad del Gobierno para pegar desde los medios. Aunque mantiene diálogo directo, aunque poco frecuente con Macri, el senador, que ayer eligió compartir un acto con el ex presidente Carlos Menem, aparece en el radar como "la alternativa”.
Sin embargo, por lo bajo, los banqueros y el campo alejan esa posibilidad de sumarlo a la lista. "Es una pantalla, Macri es el único que está en consideración”, agregó la fuente a este sitio. ¿Contará el peronismo con la fuerza necesaria para pelearle el lugar a Cambiemos? Difícil de augurar, aunque las encuestas siguen poniendo a Macri por encima de todos, incluso en su peor momento.