Mauricio Macri está convencido de continuar en la agenda política y para eso dispuso hacer un último acto como Presidente de la Nación. Será el 7 de diciembre, #7D, nada menos que en la Plaza de Mayo.

"La intención del acto es defender los valores que representó el gobierno", explicó a El Canciller un vocero presidencial, en sintonía con el anuncio de la manifestación que hizo el propio Macri en Twitter.

En los despachos de Presidencia, la organización del acto está lejos de plantearse como una despedida, sino más como un mensaje al mundo político de que Macri "continua en vigencia". Así lo describe el video oficial de la manifestación: con voz en off, el Presidente anuncia que "Esto recién empieza". Y no aparece otro dirigente de Cambiemos en el casi minuto de la grabación.

En las redes sociales, los seguidores del macrismo convocan al #7D con el hashtag  #HastaLuegoPresidente.

La fecha elegida

El acto final de Macri como Presidente conserva capítulos anteriores al anuncio oficial. Semanas atrás, los militantes de Juntos por el Cambio habían iniciado una campaña, por redes, para que el próximamente expresidente se despida de ellos en Plaza de Mayo.

La fecha elegida por los cibernautas fue el #9D (9 de diciembre), misma día -pero del 2015- en que Cristina Kirchner se había despedido de sus seguidores, también en Plaza de Mayo.

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En un principio, el equipo de Presidencia había descartado la marcha. Incluso aseguraron a este medio que Macri tenía "el foco en la transición con Alberto Fernández". Pero el tablero político cambió y la movilización se convirtió en algo formal, con la convocatoria realizada por el propio Gobierno.

La fecha elegida sí cambió y se pasó para el 7 de diciembre. Ese día del calendario también tiene un peso simbólico en el kirchnerismo: en 2012, el entonces gobierno de CFK había orquestado una manifestación en Plaza de Mayo, ya que ese día finalizaba el plazo para que el Grupo Clarín se adecue a la normativa del ahora desaparecido Afsca.

La jornada, sin embargo, quedó empañada: unos días antes de ese 7D, la Cámara Civil y Comercial habilitó una prórroga para el multimedio y el plan de adecuación que buscó el Frente de la Victoria quedó sin efecto.

El liderazgo de Juntos por el Cambio

Frente a los micrófonos, el Presidente fue reiterativo en su mensaje "de unidad" para el interior de la alianza Juntos por el Cambio. Varias veces insistió en la necesidad de "construir una oposición responsable". Y remarcó -tal cual describe el video- que no piensa retirarse de la política. "Hay gato para rato", fue su frase en su último gabinete ampliado.

Sin embargo, algunos dirigentes empezaron a cuestionar que Macri sea la voz que comande al bloque próximamente opositor. Este domingo, el diputado radical Emilio Yacobitti indicó que el fundador del Pro "no es el dueño de Juntos por el Cambio".

"Nadie puede adueñarse del 40% (de los votos).  Imaginate que si nosotros en el 2017 decíamos que este espacio no tenía que tener dueños y lo que tenía que tener era reglas, y que después los liderazgos habría de definirlos con esas reglas, menos lo vamos a creer ahora", dijo en una entrevista con Infobae.

Otros dirigentes -quizás, con mayor peso- también marcaron la cancha. Alfredo Cornejo, quien el 10 de diciembre pasará de la Gobernación de Mendoza a ocupar una banca en el Congreso rechazó la figura de Macri como líder de la oposición.

"No va a haber posibilidades de un líder único en el espacio de la oposición. Aquí no sobra nada: por eso es clave articular posiciones consensuadas que posicionen a Juntos por el Cambio para la alternancia", reflexionó en una entrevista con La Nación.

Cornejo asistió esta semana a la reunión de la nueva mesa de conducción de Juntos por el Cambio de la que fueron parte, además de Macri, Horacio Rodríguez Larreta, Maria Eugenia Vidal, Gerardo Morales, Maximiliano Ferraro, Humberto Schiavoni y Miguel Ángel Pichetto. ¿El gran ausente? Marcos Peña.

Foto: Presidencia.
Foto: Presidencia.