El ministro del Interior, Guillermo Francos, aseguró este sábado que el presidente Javier Milei "se siente con espaldas por el 56% de los votos que obtuvo con este discurso" de ajuste, en medio de la fuerte tensión con los gobernadores, que se profundizó el viernes tras el ultimátum del mandatario Ignacio Torres, quien aseguró que Chubut cortará el suministro de gas y petróleo al resto del país si la Nación no le paga hasta el miércoles $13.500 millones de fondos coparticipables correspondientes a febrero.

"Sabíamos que esto no iba a ser fácil, pero el Presidente se siente con espaldas por el 56% de los votos que obtuvo (en las elecciones) con este discurso", sostuvo el funcionario y principal negociador político del Gobierno libertario.

En declaraciones a radio Mitre, Francos lamentó la advertencia del mandatario chubutense e insistió en que el dirigente sureño "no tiene herramientas legales" para concretar su amenaza.

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"El gobernador de Chubut podrá amenazar si quiere, concretar su amenaza, pero tiene que someterse a la ley. No tiene ninguna capacidad, ninguna facultad, ningún derecho para cortar el suministro de petróleo, que lo hacen empresas privadas, que va por oleoductos privados y va al puerto. Salvo que lo haga por la fuerza y ahí estaría cometiendo un ilícito, pero no creo que sea su intención", lanzó.    

Y agregó, en línea con un posteo hecho este viernes por Milei mientras se preparaba para viajar a Estados Unidos: "Será responsable de sus actos".    

Francos consideró que Torres se siente "molesto y enojado, porque por ahí esperaba una ayuda del Gobierno que no recibió" y ratificó la política de ajuste que lleva adelante la Casa Rosada y que está generando un fuerte enfrentamiento con los gobernadores. "Las provincias también tienen que reacomodar sus gastos a los ingresos que tienen por la coparticipación y por recursos propios", comentó.

"Los gobernadores aprovecharon esta oportunidad para manifestarse en contra de una actitud muy firme del Gobierno de limitarse a lo que dicen las normas escritas", indicó.    

Ante ello, el ministro del Interior afirmó que el cuestionamiento de los mandatarios "tal vez sirva en algún momento para que las provincias y la Nación se pongan de acuerdo para hacer una modificación de la Ley de Coparticipación".    

Y concluyó: "No se tiene que ver como una confrontación del Gobierno nacional con las provincias, porque estamos siempre dispuestos a dialogar y encontrar caminos que nos permitan salir del desastre económico heredado".

La bomba de Torres explotó este viernes, cuando, en un masivo acto en la ciudad de Comodoro Rivadavia, le dio plazo hasta el miércoles al Gobierno nacional para que le gire $13.500 millones de fondos coparticipables correspondientes a febrero. De lo contrario, amenazó, Chubut cortará el suministro de gas y petróleo.

Minutos después, el sureño recibió el respaldo del resto de los gobernadores patagónicosde los 10 de Juntos por el Cambio y de los mandatarios de Buenos Aires, Santiago del Estero y La Rioja.

Antes de viajar a Washington, donde este sábado disertará en una conferencia que reúne a referentes de la derecha de Estados Unidos, el Presidente salió con los tapones de punta a responderle a "Nacho" Torres, cuya amenaza definió como "chavista".

Tras aclarar que la Nación "no retuvo nada ilegal" a Chubut, sino que se cobró parte de una deuda que el distrito sureño tiene con el Estado nacional, el libertario aseguró que "de ninguna manera el Poder Ejecutivo contribuirá al financiamiento del despilfarro de las provincias que se niegan a bajar gastos innecesarios, eliminar cargos políticos prescindibles y gobernar con la austeridad que la crisis económica heredada requiere".

Asimismo, instó a Torres a "proceder" y a "hacerse cargo de las consecuencias en la Justicia", además de emprenderla contra los gobernadores que salieron a respaldar al dirigente patagónico.

Más tarde, Milei y el gobernador tuvieron un fuerte cruce personal a través de sus cuentas en X y, en diálogo con el canal de televisión La Nación+, Torres confirmó su advertencia, consideró que el Ejecutivo nacional "quiere asfixiar a su provincia por revanchismo político" y sostuvo que es "ilegal" el recorte hecho a su administración porque Chubut mostró "voluntad de pago".

Este extremo fue negado por el ministro de Economía, Luis Caputo, quien precisó: "La deuda de Chubut con el Fondo Fiduciario de Desarrollo Provincial al 29 de febrero de 2024 asciende a $119.091.257.332,36. Su Gobierno no presentó ningún pedido de cancelación de la deuda".

"Según los términos del préstamo, las cuotas se descuentan de forma automática de los recursos coparticipados. Actualmente, hay otras 10 provincias que tienen deudas con el Fondo Fiduciario, en iguales condiciones", concluyó en un posteo en X.