Lautaro Alvaredo es el joven de 19 años que sufrió muerte cerebral tras recibir una patada en la cabeza durante una pelea afuera del boliche Cyrux, en la localidad bonaerense de Gregorio de Laferrere. En las últimas horas, se dio a conocer el video del momento en el que se desata la discusión y Lautaro termina en el piso, sin moverse más. 

El violento episodio ocurrió en la madrugada del lunes último y se inició con una discusión en el interior del local ubicado en Luro al 5700, porque a uno de los amigos de Lautaro le habían roto sus anteojos. Ante la trifulca, el personal de seguridad intervino y los echó del lugar. 

Ya en la calle, en medio de la pelea, Lautaro recibió golpes, cayó al piso y otro joven le pegó una patada en la cabeza, generándole convulsiones y muerte cerebral. En estos momentos, se encuentra internado en la clínica Mariano Moreno de La Matanza, mientras que el agresor, también de 19 años e identificado como Ian Noguera Galeano, está prófugo.

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IMÁGENES SENSIBLES. El momento en el que se desató la pelea (Video: cámara de seguridad).

En las imágenes se ve a varios jóvenes que van y vienen en una esquina lanzándose piñas y patadas. En un momento, varios quedan reunidos alrededor de uno, al que se ve en el piso inmóvil. Una moto que pasa por el lugar, se detiene a observar, y luego sigue camino, mientras el grupo rodea al caído.

El papá de Lautaro, Diego Alvaredo, contó en una entrevista al canal C5N que “era la tercera o cuarta vez" que su hijo salía a bailar

Un intercambio de mensajes por WhatsApp entre ambos muestra cómo el joven le había avisado a su papá que estaba “todo bien”, antes de ingresar al boliche donde comenzaría la disputa que terminó en su sentencia de muerte. Diego, lo alentó a “pasarla lindo”, no sin antes advertirle “cuidáte y alejáte de los problemas”.

“Yo le pedí que por favor me avisara que estaba bien, que iba en Didi y volvía en Didi. Esa era la condición para que no tuviera problemas ni me lo robaran en la calle, pero me lo mataron igual”, declaró ante las cámaras el padre desconsolado.

En tanto, la madre del prófugo, pidió que se investigue lo que sucedió, ya que su hijo Ian “le contó otra historia” y expresó que lo ocurrido fue "una desgracia". En diálogo con Telefe Noticias aseguró: "Dicen que estaba con una patota y yo hablé con mi hijo, el amigo y su amiga, ellos eran solo 3 y nos dicen todo lo contrario".

El joven amante de la música, el fútbol y los autos

Lautaro apenas había terminado el colegio y soñaba con estudiar Administración de empresas. Además, trabajaba para ayudar económicamente a su familia. Su tía Camila contó que se desempeñaba "en un local de productos químicos y ayudaba a hacer el reparto, y los fines de semana se encargaba del sonido de los shows que su padre ofrecía en los bares de González Catán”. 

Amante de la música, especialmente del cuarteto, un género que conocía muy de cerca por la banda de su papá. Le encantaba jugar al fútbol, era hincha de Boca y le gustaban mucho los autos, por lo que solía acudir a muestras y exposiciones. 

"Se caracterizaba por solucionar los problemas. Siempre estaba dispuesto. Un pibe sano, viste, casero, que resolvía como un adulto. Cuidaba a sus hermanos y los llevaba o pasaba a buscar cuando era necesario", agregó su tía.

Luego del calvario para recibir atención médica, la familia de Lautaro había comentado que pediría ayuda al abogado Fernando Burlando, defensor de la familia de Fernando Baez Sosa, el joven que murió tras una golpiza masiva de un grupo de rugbiers a la salida de un boliche en Villa Gesell en 2020. 

“Estoy dispuesto a dar una mano”, respondió Burlando, quien fue clave para lograr la condena a los cinco rugbiers involucrados en el asesinato de Baez Sosa.