Simuló una mudanza a España, pero buscaba contrabandear 6.400 fósiles, incluidos huevos y el esqueleto de un dinosaurio
El cargamento había partido de Río Negro y contaba también con el resto petrificado de una margarita de 47 millones de años. Los responsables, identificados como Rodolfo Pedro Corsolini y su hijo Julián, fueron imputados por la Justicia.
Un hombre intentó contrabandear 6.400 fósiles enviándolos ocultos en contenedores desde Río Negro a España mientras simulaba una mudanza, informó este martes la Dirección General de Aduanas (DGA). La colección es de un incalculable valor patrimonial, ya que incluye el resto petrificado de una flor de margarita de 47 millones de años que es el más antiguo del mundo, además de huevos y el esqueleto completo de un dinosaurio.
A su vez, entre los fósiles que fueron escondidos utilizando dobles fondos y revestimientos de yeso y otros materiales, había un amonite de más de 20 centímetros de diámetro y piezas de ámbar de millones de años, con insectos en su interior. Según informaron desde el organismo, se cree que algunos de los elementos son de otros países y que habrían llegado a la Argentina de contrabando.
Por el intento de ingresar el cargamento oculto a España, que la Aduana frenó, fueron imputados Rodolfo Pedro Corsolini y su hijo Julián Corsolini, quien aseguró que el dueño del cargamento era su papá pero que él firmó la salida del contenedor porque era quien viajaba al país mediterráneo.
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El cargamento fue identificado gracias a una advertencia que los vecinos de Corsolini hicieron a las autoridades de Río Negro por movimientos extraños y, si bien cuando el aviso llegó a la Aduana los bienes ya habían salido del país, se emitió una alerta internacional para que su homóloga de España detenga e inspeccione los contenedores.
Además, se enviaron al puerto de Valencia especialistas en bienes culturales, quienes comprobaron la presencia de más de 6.400 piezas de restos fósiles.
Tras su incautación, la colección regresó a la Argentina, en donde el Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia y el Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano (INAPL) certificaron la autenticidad de las piezas y las entregaron a la provincia de Río Negro.
Durante el acto de entrega de las piezas, el director general de Aduanas, Guillermo Michel, afirmó: “Estamos ante el mayor secuestro de bienes culturales de la historia argentina y es un orgullo poder devolver nuestro patrimonio a su lugar de origen”. Asimismo, remarcó que el Museo, el INAPL y la aduana española fueron “determinantes en la recuperación de las piezas”.
Por su parte, el director del Museo Bernardino Rivadavia, Luis Cappozzo, resaltó “el aporte, cuidado e investigación del equipo de científicos y científicas del Museo en la restitución de este material totalmente valioso”. A su vez, destacó que el trabajo de las diversas instituciones del Estado “es un ejemplo de la integración de los organismos involucrados, cada uno en cumplimiento de sus respectivas misiones, desde sus conocimientos y procedimientos”.
La Aduana recordó que la exportación legal de piezas paleontológicas y arqueológicas necesita el aval de ambas entidades, establecidas como autoridades de aplicación por la Ley N° 25.743. Sin embargo, la colección que intentaron contrabandear los Corsolini carecía de certificaciones, por lo que los imputados violaron los artículos 610 y 954 del Código Aduanero, como así también la Ley N° 19.943, de Bienes Culturales. En consecuencia, Corsolini tiene un pedido de captura internacional y podría recibir una pena de entre cuatro y 10 años de cárcel.
Según trascendió, Pedro Corsolini se presentaba ante terceros como director del Museo del Lago Gutiérrez, que no se encuentra registrado ante la dirección de Bibliotecas y Museos de la secretaría de Estado de Cultura de Río Negro. En tanto, su hijo trabajaba en ese lugar y también en la secretaría de Cultura de la provincia.
La causa, en la que es querellante la DGA, está a cargo del juez federal de Neuquén, Gustavo Villanueva, quien subroga el Juzgado Federal de Bariloche. A su vez, interviene el fiscal Rafael Vehils Ruiz, interinamente al frente de la Fiscalía Federal de Bariloche, que pidió el procesamiento de los dos imputados.