Un joven de 19 años fue asesinado de un tiro en la cabeza el jueves pasado, cuando ingresaba a la casa de sus padres en Burzaco, partido de Almirante Brown. La víctima mantenía una imagen muy activa en sus redes sociales, ya que se dedicaba a dar consejos de finanzas y "trading". Se investiga si habría sido un ajuste de cuentas o un intento de robo.

Si bien el crimen ocurrió hace una semana, recién en las últimas horas trascendió que Franco Saulle recibió un disparo en el ojo derecho, lo que le causó la muerte cerebral y minutos después el fallecimiento. 

Más allá de su entusiasmo por las finanzas, la víctima se mostraba en redes sociales como un joven que llevaba una vida de lujo, con fotos de autos en Nordelta o viajando por Estados Unidos y Qatar

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(Foto: @_francosaulle).

En su descripción de Instagram, donde tenía más de 122.000 seguidores, mencionaba que era un "trader con experiencia", "mentor apasionado" y que ayudaba a que los usuarios se conviertan "en inversionistas exitosos a través de estrategias prácticas". 

Semanas antes del suceso, había publicado dos videos en YouTube en una cuenta llamada "Cronos Trading Academy", una comunidad que creó para "educar y capacitar a las personas en el ámbito financiero".

(Foto: @_francosaulle).

Según informaron sobre el hecho, Franco estaba estacionando su vehículo en la puerta del domicilio de sus padres, cuando fue sorprendido por tres delincuentes que bajaron de un Peugeot 208 negro. Gracias a las cámaras de seguridad, identificaron que la patente correspondía a un auto robado.

El seguimiento llevó a los investigadores a encontrarse con el rodado en una casa de la calle San Juan al 1800, en Glew, tapado con un nylon.

Sobre estos hallazgos, los efectivos dialogaron con la dueña del domicilio, identificada como Claudia Bercesie, de 33 años, quien explicó que el día del asesinato su cuñado y otro hombre llegaron a la casa, dejaron el auto y se fueron. Ante estas declaraciones, la mujer quedó detenida por el delito de encubrimiento.

En cuanto al crimen, se investiga si se trató de un intento de robo o un ajuste de cuentas, considerando que los delincuentes no se llevaron nada del lugar y que la víctima trabajaba con activos virtuales, como criptomonedas.