Luego de que este viernes por la mañana se denunciara la presencia de un hombre disparando desde un balcón en el barrio de Palermo, desde la cartera de Seguridad porteña esclarecieron que se trató de "un dicho de un obrero que quería tomarse el día de laburo", en declaraciones a La Nación.

El trabajador se acercó al capataz de la construcción y le aseguró haber recibido un disparo. En consecuencia, se convocó a la policía y al SAME para atender al supuesto herido, que presentaba una lesión superficial en el antebrazo derecho.

Con el correr de los minutos, los efectivos cortaron el tránsito sobre Luis María Campos, entre Ravignani y Arturo Dresco, para que los oficiales pudieran buscar a un tirador de entre 25 y 30 años, que nunca existió.

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Antes de que se aclarara la situación, Alberto Crescenti contó: "Hace rato no teníamos un episodio similar. Está cortado el tránsito, por eso pedimos no circular por aquí hasta que la Policía lo ubique (al tirador)".

"No se asomen a las ventanas ni salgan a los balcones. Se esta buscando si el arma utilizada es de aire comprimido", declaró el titular del servicio de emergencias.

Mientras el SAME atendía al obrero, la Policía se dirigió al edificio señalado por el damnificado. El personal entrevistó a una vecina que había realizado otro llamado al 911: la mujer afirmó que sabía que hace algunos años había una persona que disparaba con balines a las palomas.

La confusión fue esclarecida por una fuente de la cartera de Seguridad, que le indicó al diario La Nación: "Le dijo al capataz que tenía una lastimadura, que ayer había visto a una persona manipulando un arma de aire comprimido y que quizás era un balín".

Finalmente, en el caso intervino la Unidad de Flagrancia Norte, a cargo de María Milagro Sauls, que pidió la declaración del herido y del capataz. Acto seguido, se procederá a cerrar la el caso.