El crimen de José Luis Cabezas, perpetrado el 25 de enero de 1997 en Pinamar, continúa resonando en el conjunto de la sociedad. En este caso, su hermana Gladys reveló un oscuro encuentro que tuvo su hijo con Horacio Braga, uno de los asesinos: "Yo fui uno".

Gladys comentó que el episodio ocurrió "hace 15 o 20 días", cuando su "hijo del medio", en el marco de un recital al que asistió en la ciudad bonaerense de Baradero, comenzó una conversación con uno de los vendedores de choripanes del lugar.

La charla dio un giro inesperado cuando el hombre se jactó del asesinato del fotógrafo: "Yo tengo acá la parrilla de choripanes, en toda la provincia. Porque yo estuve detenido, yo fui uno de los que mataron a Cabezas".

TE PODRÍA INTERESAR: "No había explicación natural": declaró el ingeniero que destapó las muertes de los bebés en el Neonatal de Córdoba 

"Jodeme, era mi tío", fue la respuesta instantánea del joven, según lo relatado por su mamá en diálogo con Radio La Red. "¡Uh loco, qué se yo!", fue la contestación que recibió. A quien tenía en frente era a Braga, miembro de la banda Los Horneros, responsable del crimen.

La hermana de Cabezas develó que su hijo quedó "perplejo", aseguró que no pudo disfrutar del recital porque no podía parar de pensar y contó que luego fue al puesto de Braga para filmarlo.

"El tipo le dijo 'te lo dije y no me dijiste nada y ahora me venís a filmar'. Una impunidad. Es increíble. Ese Braga es el que, cuando estuvo borracho, contó que habían matado a Cabezas y por eso lo agarraron. Uno de Los Horneros", agregó.

El criminal había sido condenado a 18 años de prisión, pero luego la Cámara de Casación le redujo la pena, como al resto de los implicados, a excepción de Gustavo Prellezo, por lo que recuperó su libertad el 30 de abril de 2005. "Yo ya pagué", había manifestado en aquel momento.