Este sábado en el partido bonaerense de La Matanza, un hombre y una mujer fueron detenidos por integrar una banda que se dedicaba a la liberación masiva de equipos de telefonía celular robados.

La aprehensión de los delincuentes tuvo origen cuando los agentes federales de la División Delitos Tecnológicos detectaron la existencia de una estructura delictiva que realizaba una serie de maniobras de promoción de desbloqueo de dispositivos móviles para reiniciarlos y, así, reinsertarlos en el mercado.

La investigación condujo a los efectivos policiales a un ciberpatrullaje en Instagram y Facebook, por donde se efectuaba el servicio, para resetear los dispositivos con la configuración "de fábrica". De esta manera, lograron identificar un total de nueve inmuebles ubicados en las localidades bonaerenses de González Catán y Gregorio de Laferrere.

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En consecuencia, el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N°2 de Morón, a cargo de Jorge Rodríguez, ordenó los allanamientos y las capturas de los líderes de la banda, mientras que identificó a otras diez personas como integrantes de la organización delictiva.

Los policías, además, incautaron 117 teléfonos celulares, 202 tarjetas sim card, 13 tablets, cuatro netbooks, cuatro CPU, dos notebooks, $844.410 en efectivo y documentación de interés para la causa. Todos estos elementos quedaron a disposición del magistrado interventor por infracción a la Ley de Servicios de Comunicaciones Móviles.

En septiembre pasado, el juez Daniel Rafecas había ordenado una serie de allanamientos a fin de encontrar a los responsables de una estafa similar. En este caso, a los usuarios les llegaba un mensaje por una plataforma denominada "i-Server", en la que se aportaba un "link para recuperar la contraseña" de un dispositivo de Apple. La organización criminal había sido montada en la Argentina, pero operaba internacionalmente.

Además, en la semana se difundió un nuevo método usado por los delincuentes para vaciar una cuenta bancaria: un falso cartel de multa que se estampa en los vidrios de los vehículos. Al escrito lo acompaña un código QR que da acceso a una cuenta bancaria al ser escaneado.