En sus reuniones con inversores y financistas en Nueva York, el presidente Mauricio Macri exhibe como principal activo el respaldo del peronismo dialoguista al ajuste plasmado en el presupuesto 2019. A 8500 kilómetros del mandatario, el ministro Rogelio Frigerio negocia con los gobernadores para que sumen su firma al recorte federal. El PJ se muestra como garante de la gobernabilidad y Miguel Ángel Pichetto aprovecha la necesidad del oficialismo para dejar afuera del escenario a Cristina Kirchner.

Macri expone ante los mercados los efectos positivos de la mega devaluación para los inversores. 

Con el peronismo como garante del ajuste, Macri busca convencer a los tiburones de Wall Street para que inviertan en Argentina y expone ante los mercados el cambio de contexto que niega en su propia tierra: con la mega devaluación, la reducción del salario real y la pérdida de poder adquisitivo, los costos laborales se licúan y el país se vuelve rentable.

En tanto, en Argentina, Frigerio negocia con los gobernadores del PJ para que convenzan a sus senadores de pagar todos juntos los costos del ajuste a medida del FMI. El peronismo ya aportó la firma de cinco gobernadores -Domingo Peppo (Chaco), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Sergio Uñac (San Juan), Juan Schiaretti (Córdoba) y Juan Manuel Urtubey (Salta)-, pero el oficialismo quiere a 20 mandatarios poniendo la firma en el plan económico de Macri.

Pichetto: “El kirchnerismo es una etapa concluida”

Necesario para aprobar el presupuesto en el que los intereses de deuda lideran el podio del gasto, el senador titular del bloque Argentina Federal, Miguel Pichetto, vuelve a mostrarse como el garante de la gobernabilidad y acentúa sus diferencias contra el kirchnerismo. Si la senadora de Unidad Ciudadana vuelve al partido justicialista, el dirigente rionegrino va a sufrir el rencor de la expresidente.

El oficialismo no quiere dejar afuera de la carrera a Cristina e insiste con la grieta y la polarización para conseguir la reelección. Cuando nombran a otros candidatos del kirchnerismo, los dirigentes de Cambiemos responden que prefieren competir “contra las primeras líneas”. Pichetto, por su parte, advierte que al Gobierno le es funcional “competir con el pasado” y mantiene su postura de no pedir el desafuero de CFK. Mientras tanto, el escenario de tres tercios no se ve en las encuestas y la dirigente de Unidad Ciudadana no pierde ni un voto.

"Los encuestadores y el periodismo le dan una centralidad permanente a Cristina”

El jefe de los senadores peronistas explicó que "con la reforma de la ley de fueros se permite la investigación desde el primer momento  sin que haya ningún bloqueo". "Lo que estamos discutiendo es si debe haber privación de la libertad a partir del procesamiento. Yo creo que no. Implicaría una pena anticipada", agregó.