La batalla de la provincia de Buenos Aires comenzó a atravesar un momento culminante: con casi el más del 90% de votos escrutados, arrojan una victoria de Esteban Bullrich sobre Cristina Kirchner. Cambiemos alcanza un 42,71% de votos, mientras que Unidad Ciudadana llega a unos 35,95%. En las PASO este nivel de carga recién se cristalizó a las 23.30 y la diferencia era de 5 puntos. Ahora es de 5.4. 

Hasta este momento, Cambiemos está ganando en 15 distritos del país. En el búnker de Cambiemos, centralizado en Costa Salguero, el efecto Santiago Maldonado no modificó los planes pero sí algunas tendencias. Hubo globos, música y algarabía generalizada. Pasó Michetti, Larrta y Carrió, entre otros. “Esta es la victoria de un pueblo desde la quiaca hasta Santa Cruz”, sostuvo la candidata de “Vamos Juntos”. Más que la victoria puntual- que planean reservarse- hasta que estén los resultados irreversibles en Buenos Aires, Cambiemos nacionalizó el triunfo y está en el umbral, prácticamente consolidado de “pintar de amarillo” los principales centros urbanos: Córdoba, Mendoza, Santa Fe, la ciudad de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires. Hay un dato más importante aún. Cambiemos se quedó con el triunfo en las 9 de las 10 provincias más grandes. Solo pierde en Tucumán. 

En el búnker de Unidad Ciudadana, el clima es calcado al del 13 de agosto, jornada de las PASO. Si bien comenzó de forma tímida, ahora la expectativa toma posesión del microestadio de Arsenal de Sarandí. Cercanos a Cristina piden paciencia y la militancia baila, canta y espera. Se especula con una posible denuncia de fraude por parte de Unidad Ciudadana, ya que analizan que puede llegar a ocurrir el “conteo selectivo” que ocurrió en las PASO. Con una velocidad impensada, se espera que para cerca de las 00 horas el conteo esté cercano al 97%.