En su último discurso, Maqueda alertó por los "hombres que se creen proféticos y ponen en riesgo la democracia"
El ministro de la Corte Suprema de la Nación, quien se jubilará el próximo 29 de diciembre al cumplir 75 años, pidió también retomar "la moderación, la prudencia y la independencia del Poder Judicial".
En su último discurso en el marco de su despedida de la Corte Suprema, dado que se jubilará el próximo 29 de diciembre, Juan Carlos Maqueda advirtió sobre "los hombres que rinden culto a la personalidad, se consideran profetas y ponen en riesgo la convivencia democrática".
El magistrado, que dejará su cargo tras más de dos décadas al cumplir los 75 años, consideró que "la democracia vivió épocas mejores que las actuales" y pidió retomar "la moderación, la prudencia y la independencia del Poder Judicial".
Durante un acto realizado en el Patio de Honor del Palacio de Justicia -que contó con la presencia de Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz y al cual se ausentó Ricardo Lorenzetti-, el magistrado alertó: "No podemos quedar a la deriva de los hombres que en este momento hacen culto a la personalidad".
En este sentido, apuntó contra los "hombres proféticos o que se creen proféticos y que realmente ponen en riesgo las instituciones de la convivencia democrática" y, ante los más de 500 asistentes, sostuvo que el Poder Judicial debe "dejar sentada" la "defensa de las instituciones".
Al respecto, Maqueda -quien fue reconocido por su trayectoria- opinó que "a pesar de que no esté de moda" y de que "hoy se transiten los extremos", hay que "volver a la moderación, a la prudencia y a la defensa de la división de poderes y de la independencia del Poder Judicial".
Previamente, Rosatti, quien preside la Corte, definió al Ministro como "un gran juez y hombre republicano; raro ejemplo de un funcionario que ha transitado, con idoneidad y ejemplaridad en su conducta, los poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial en los ámbitos nacional, provincial y municipal".
Además, destacó que desempeñó "un rol preponderante" como convencional constituyente en la reforma de 1994 y lamentó que en el últimos tiempo "fue objeto de injustos agravios y cobardes ataques, que sobrellevó con hidalguía y tolerancia", a la vez que aseguró que "se va por la puerta grande".
Asimismo, recordó que "tuvo una actuación protagónica" en fallos relacionados con el federalismo, la protección de los vulnerables y la defensa de los derechos humanos, a los que consideró "tres ejes de sus preocupaciones".
Tras subrayar que es "una referencia y guía" para sus pares y una "voz siempre escuchada, respetada, ponderada y sabia", Rosatti puntualizó que Maqueda "hace cierta la afirmación de que haber participado en política antes de acceder a la Justicia no es un demérito, sino todo lo contrario".
Con su salida, la Corte quedaría conformada por tres miembros. En este marco, Javier Milei considera cada vez con más fuerza nombrar como jueces a Ariel Lijo y Manuel García Mansilla, a pesar de la resistencia en el Congreso.