El exmédico presidencial declaró que vio el moretón en el ojo de Yañez, pero que fue por un "golpe involuntario"
Además de Federico Saavedra, asistieron a Comodoro Py las abogadas de las partes, a quienes el fiscal citó para abrir los sobres con testimonios reservados de tres testigos presentados por la defensa del exmandatario.
El extitular de la Unidad Médica Presidencial Federico Saavedra brindó este jueves su testimonio en la causa contra Alberto Fernández por violencia de género, en el marco de la cual declaró que vio el moretón en el ojo de Fabiola Yañez y que en ese momento tanto ella como el expresidente le dijeron que se trató de un "golpe involuntario".
Además, ratificó que le dio a la ex primera dama globulitos de árnica para curar el hematoma, tal como había indicado ella. Para esta jornada, el fiscal federal Ramiro González convocó también a las abogadas del exmandatario y de la denunciante, con el objetivo de abrir los sobres con las declaraciones hechas ante escribano por tres testigos que fueron aportados por la defensa del exmandatario.
El médico arribó cerca de las 10 y se retiró alrededor de las 17 de los tribunales de Comodoro Py, donde respondió alrededor de 100 consultas tras ser señalado por Yañez como el profesional de la salud que le recetó el tratamiento homeopático después del golpe en el ojo derecho -cuya foto consta en el expediente- que ella dijo haber recibido por parte de su entonces pareja.
Este dato lo convirtió en un testigo clave para la Justicia y su testimonio era aguardado con singular expectativa luego de que ambas partes lo relevaron de mantener el secreto profesional.
En su extensa declaración, Saavedra dio detalles de cómo funcionaba la Unidad Médica Presidencial, del momento en que conoció a Fernández y de cuál era su vínculo con Fabiola. En ese sentido, sostuvo que la exprimera dama no lo eligió como médico de cabecera y que hacía otras consultas con profesionales de su prepaga.
También detalló que nunca tuvo que derivarla a otro profesional o institución, subrayó que Yañez no tenía una enfermedad de base y precisó los medicamentos que tomaba, uno de ellos diagnosticado para la depresión.
Previamente, la fiscalía había decidido que también se proceda en la fecha a la apertura de los mencionados escritos presentados por la defensa de Fernández, para leer su contenido, escuchar los planteos de las partes y decidir si cita a declarar a esas personas.
La abogada del expresidente, Silvina Carreira, aportó esos testimonios en sobre cerrado y permanecieron en la sede de la fiscalía, en el quinto piso de los tribunales de Retiro. La letrada sostuvo que los nombres de los testigos -identificados con letras- debían quedar a resguardo por cuestiones de "seguridad nacional", ya que se trata de extrabajadores de la residencia oficial de la figura presidencial.
Según trascendió de fuentes judiciales, los testigos "A" y "G" son una empleada doméstica que trabajó para Fernández cuando vivía en el departamento del barrio porteño de Puerto Madero y que luego, cuando resultó electo, se mudó a la residencia oficial, y una niñera que prestó sus servicios a la pareja. Posteriormente, se presentó el testimonio del "D".
En las dos primeras declaraciones, las mujeres hablaron de supuestos "buenos tratos" de Fernández hacia Yañez y adjudicaron los moretones en los ojos y en el brazo de la denunciante -que se observaron en unas fotos que constan en la causa- a un tratamiento estético. Deslizaron, además, que la también periodista tomaba alcohol de manera habitual.
En tanto, para el 12 de septiembre está citada a declarar en la causa Sofía Pacchi, quien al momento de los hechos era amiga de la entonces primera dama y una de las asistentes en 2020 a la controvertida Fiesta de Olivos durante la pandemia por Covid-19.
La Fiscalía aguarda además el resultado del trámite de un exhorto a España para que declare por videoconferencia la madre de la demandante, Miriam Verdugo, quien se encuentra en ese país junto a su hija y a su nieto, Francisco, de 2 años.
Ya declararon la periodista Alicia Barrios y María Cantero, exsecretaria privada de Fernández y de cuyo teléfono celular surgieron las fotos en las que se observa a Yañez con moretones en la cara y en los brazos, que derivaron en el inicio de la causa por violencia de género.