Pablo Ventura, el joven que estuvo detenido algunos días como supuesto partícipe del crimen de Fernando Báez Sosa, dijo que a los ocho rugbiers ahora enjuiciados los vio pelear "en varias situaciones, a la salida de algún boliche en Zárate o en jodas".   

El joven es oriundo de la ciudad bonaerense de Zárate donde también vivían los ocho acusados del asesinato de Báez Sosa y, ante la afirmación del testigo, el fiscal Juan Manuel Dávila le repreguntó por qué se refería a que actuaban en grupo: "Siempre, eran tres, cuatro o cinco, siempre eran mayoría a la hora de pelear contra una o dos personas".  

Ventura recordó que al día siguiente del asesinato de Báez Sosa la DDI de Campaña lo fue a buscar a su casa de Zárate y luego fue trasladado a Villa Gesell, a la fiscalía.   

Allí -recordó- le dijeron que él había sido mencionado por uno de los rugbiers entonces detenido, como partícipe del ataque y que, ante las preguntas del fiscal, el joven ratificó que, al momento del crimen, él estaba en la ciudad de Zárate.