Ya son varios los políticos, funcionarios o abogados que se pronunciaron en contra de la decisión de Javier Milei de asignar a Ariel Lijo y Manuel García Mansilla como jueces de la Corte Suprema a sola firma. En esta ocasión, fue Juan Carlos Maqueda -quien dejó hace pocos meses una de las vacantes en el Máximo Tribunal- el que criticó la decisión del mandatario: "Me pareció horrible el decreto y la actitud del Poder Ejecutivo y del Presidente, que a tres días de que comiencen las sesiones ordinarias, tome esta decisión". Además, opinó que la acción del Poder Ejecutivo "está la borde de la inconstitucionalidad".

En una entrevista con LN+, el exjuez de la Corte Suprema declaró en primer término: "Creo que mientras esté contemplado en el texto de la Constitución, que está en el artículo 99, inciso 19, se puede llevar adelante en función de la legalidad que tiene eso. Pero no quiere decir que no sea cuestionado judicialmente y que no pueda haber otras opiniones, como las hay, en cuanto a que este procedimiento está especialmente incorporado en la reforma constitucional de 1860".

Con todo, explicó que aquella reforma fue llevada a cabo en un contexto "absolutamente distinto al actual": "En aquel momento había un Congreso que funcionaba del 1 de mayo al 30 de septiembre, también era un país donde no había carreteras, ferrocarriles, entonces obviamente era necesario un instrumento de este tipo".

"Es horrible la actitud del presidente de la Nación": el exjuez Maqueda advirtió que los pliegos de Lijo y García Mansilla "se tienen que seguir dialogando".

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Debido a ello, argumentó que "hay un desacople entre la realidad y el decreto para lo que fue creado": "No puede postergar lo que es el artículo 99 inciso 4, que es donde la Constitución reformada en el 94, establece cómo se deben elegir los miembros de la Corte".

Así, el magistrado que se retiró en diciembre de 2024 al cumplir la edad jubilatoria se proclamó "defensor de las instituciones democráticas y de la división de poderes", y, debido a ello, trata "con sumo respeto" a los próximos jueces de la Corte Suprema. 

El exministro judicial también contradijo al vocero presidencial, Manuel Adorni, quien había expuesto que la Casa Rosada tomó la decisión de designar a los jueces luego de la "inacción" de la Cámara alta: "No sé en qué lugar de la Constitución lo dice... Esto no es así. Los pliegos tienen que seguir en el Senado, se tiene que seguir dialogando y buscando acuerdos".

Además, aclaró: "El artículo 99 inciso 19 le permitía, sin tacharlo directamente de inconstitucional, al Poder Ejecutivo sacar este decreto nombrando en comisión a dos jueces. De la misma manera hay antecedentes jurisprudenciales en los que la Corte se ha expedido en que si la Cámara alta trata un pliego y lo rechaza, el juez debe dejar de prestar funciones en el mismo momento. Lo que establece la Constitución es un límite".

Al ser consultado por la otrora polémica designación de Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz, que sucedió en 2015 durante el mandato de Mauricio Macri, el exmagistrado expresó que ambos jueces -actuales integrantes de la Corte junto a Ricardo Lorenzetti- "estuvieron en un término en el Congreso, específicamente en el Senado, cumplieron con la manda constitucional y así se pudieron integrar" a la mayor instancia del Poder Judicial de la Nación. 

"En Argentina vivimos de democracia, pero hay una baja calidad institucional que la vemos en el abuso de los decretos de necesidad y urgencia y de los vetos. Hay un abuso, por parte del Presidente, de un lenguaje descalificador a propios y ajenos que no es propio de la democracia. Cuando la violencia empieza por la vía del maltrato a las personas termina en el peor de los autoritarismos", concluyó Maqueda.