Uruguay define este domingo a su nuevo presidente, en un balotaje que enfrenta a Álvaro Delgado, del oficialista Partido Nacional, con Yamandú Orsi, del Frente Amplio. El elegido será el sucesor de Luis Lacalle Pou y gobernará desde 2025 hasta 2030. Las encuestas proyectan un empate técnico, pero con leve ventaja para la oposición.

En unos comicios que registraban una importante concurrencia, la cual se estimó ampliamente por encima del 60%, por la mañana, se acercaron a sufragar el exmandatario José "Pepe" Mujica -uno de los referentes frentistas e íconos políticos del país vecino- así como los dos candidatos entre los que está el próximo gobernante uruguayo.

"Hoy no representamos partidos, nosotros representamos proyectos", dijo Delgado en alusión a la coalición que formó con el Partido Colorado, Cabildo Abierto, el Partido Independiente y el Partido Constitucional Ambientalista. "No solamente júntense para ganar, sino júntense para gobernar. Más que mayoría, (es importante) buscar acuerdos", agregó en referencia a la postura dialoguista que prometió adoptar ante un eventual triunfo.

El momento del sufragio de Delgado (Video: Telemundo).

Por su parte, Orsi señaló sobre sus augurios y saludos al adversario: "Se le desea (suerte), pero un poquito menos que a uno". Además, afirmó que durante la jornada no pedirá información sobre cómo viene la votación y que seguirá el avance por la prensa. "Es una experiencia increíble, cargada de razón y afecto. Esto fortalece y permite mirar hacia el futuro", expresó.

"La esencia de la política son los acuerdos. Nunca terminás conforme del todo. Mi línea argumental es la que he tenido desde hace años. No me gusta hablarle a los segmentos. Tenés que decir lo que pensás y sentís. Acomodar el cuerpo a necesidades electorales a la larga es una trampa", declaró en rueda de prensa en la que destacó la coincidencia de todos los partidos acerca de la necesidad de que haya consensos.

Así votó Orsi, antes del mediodía (Video: Telemundo).

TE PODRÍA INTERESAR:

El desempate se oficializó luego de que en las elecciones celebradas el 27 de octubre pasado ningún candidato superara el 50% de los votos. En esos comicios, Orsi se impuso con el 43,9%, mientras que Delgado logró el 26,8%. Más atrás quedó Andrés Ojeda, del Partido Colorado, con el 16%.

Aquella jornada electoral también sirvió para elegir a los diputados y senadores. En este sentido, el partido político que cuenta entre sus filas con el expresidente uruguayo se llevó el premio mayor al obtener 16 de los 30 escaños de la Cámara alta y 48 de los 99 de la baja.

Para esta segunda vuelta, la mayoría de las encuestas proyecta un empate técnico, aunque con una diferencia mínima a favor de la oposición. La consultora Factum prevé solo un 0,5% de distancia (47,1% a 46,6%), un número similar a Cifra, que estimó un 0,6% (47% a 46,4%).

"Orsi tiene 39% de votos firmes, de gente que dice que seguramente no cambiará su sufragio de aquí al domingo, y otros 8 puntos de voto débil, de ciudadanos que podrían modificar su elección o solo tienen una preferencia débil hacia él. Delgado tiene 36,9% de votos firmes y 9,5% de débiles", explicaron desde Cifra en su informe oficial.

Por su parte, la encuestadora Equipos calculó una distancia del 1,8% a favor del Frente Amplio (48% a 46,2%). "Las diferencias están comprendidas dentro del margen de error de la medición y puede hablarse de un empate técnico entre ambos candidatos", señalaron.

El pasado jueves, ambos candidatos realizaron su respectivos cierres de campaña. En el Obelisco de Montevideo, Delgado, junto a su compañera de fórmula, Valeria Ripoll, señaló que serán votados por "una mayoría silenciosa que no tiene bandera, que no tiene balconera, que hoy prefiere la continuidad de un gobierno que le fue mejor que al Frente Amplio".

Orsi, acompañado su candidata a vice, Carolina Cosse, expresó en Las Piedras, en el departamento de Canelones, que el domingo habrá dos opciones: la de "un país estancado con promesas incumplidas o la de un cambio seguro".

El izquierdista de 57 años es un docente de Historia y comerciante que fue intendente del departamento de Canelones entre 2015 y marzo de 2024, cuando renunció para encarar la campaña presidencial. Ese mismo mes quedó envuelto en un escándalo, después de que una mujer trans lo acusara de un presunto abuso sexual. La denunciante, finalmente, confesó que todo había sido falso. Está apadrinado por Mujica, quien en la actualidad lucha contra un cáncer, y representa la gran esperanza del Frente Amplio para regresar al poder.

Delgado, por su parte, nació en Montevideo, tiene 55 años y es veterinario. El candidato oficialista fue inspector general del ministerio de Trabajo y Seguridad Social, y llegó al Congreso en 2005, en el que fue reelecto y cumplió dos períodos como diputado hasta 2015.

Ese año fue elegido senador. En 2020 renovó su escaño, pero renunció a la Cámara alta para asumir como secretario de la Presidencia. Dejó ese cargo en diciembre pasado para lanzar su candidatura a la Jefatura de Estado.