En una escuela de la localidad de Azambuja, en el distrito portugués de Lisboa, un estudiante de 12 años apuñaló este martes a seis compañeros, de los cuales uno de ellos debió ser trasladado por heridas de gravedad, aunque su vida no corre peligro.

El coronel de la Guardia Nacional Republicana (GNR), Fernando Lisboa, reveló que las victimas tienen entre 11 y 14 años, al tiempo que especificó que la mayor damnificada es una niña, que sufrió heridas en el tórax.

Por este motivo, la pequeña debió ser trasladada a un hospital de la capital, aunque está fuera de peligro, según contó el alcalde de Azambuja, Silvino Lúcio. "Nada indicaba este tipo de actitud", profundizó, luego de haber contado que el agresor fue a comer a su casa y volvió con un cuchillo.

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El vocero de la Guardia Nacional Republicana señaló, por su parte, que el autor del ataque estaba "tranquilo" y a la espera de hablar con la Policía Judicial, que se encargará de la investigación. Sucesivamente al episodio, el resto de los chicos fueron entregados a sus padres.

En una nota publicada en la página oficial de Presidencia, el mandatario Marcelo Rebelo de Sousa aseveró que "ninguna circunstancia puede legitimar tal acto de violencia" y enfatizó en que este episodio deber ser "investigado" para una futura "condena sobre la necesidad de educar para la paz, la concordia, la tolerancia y el civismo".

El ataque también fue reprobado por el primer ministro portugués, Luís Montenegro, quien expresó en su cuenta de X que se trató de un "acto aislado y un fenómeno extraño a la sociedad portuguesa, pero que debe hacer reflexionar con sentido de responsabilidad de todos los que actúan en el espacio público".